El español Óscar Freire (Katusha) persigue a los 36 años la cuarta victoria en la Milán-San Remo, la primera gran clásica de la temporada, la 'classicissima' italiana con la que sueña gran parte del pelotón por su historia y prestigio, por la que lucharán principalmente los grandes velocistas, habituales conquistadores del primer escalón del podio.
El cántabro, en su último año como profesional, pretende hacer un póker en la 103 edición de la San Remo, la más larga de las clásicas, con un recorrido de 298 kilómetros, lo que supone un ejercicio de gran fondo durante cerca de siete horas.
Freire ya alzó los brazos en 2004, 2007 y 2010, la locomotora suiza Fabian Cancellara quiere reeditar su éxito de 2008 y llega en forma, y uno de los señalados como favorito es el esloveno Sagan, de 22 años, que compartirá filas con el italiano Nibali, lanzado a raíz de triunfo en la Tirreno-Adriático.
Freire ya alzó los brazos en 2004, 2007 y 2010, la locomotora suiza Fabian Cancellara quiere reeditar su éxito de 2008 y llega en forma, y uno de los señalados como favorito es el esloveno Sagan, de 22 años, que compartirá filas con el italiano Nibali, lanzado a raíz de triunfo en la Tirreno-Adriático.
