Barreras tiene el contador de pedidos a cero -algo histórico en el astillero vigués, que no se recordaba desde la reconversión de los 80- y espera poder lograr un contrato (un ferry) con la naviera canaria Armas en cuestión de días. Así lo dijo ayer el presidente de la compañía, José González Viñas, al término de una reunión con el alcalde.
No obstante, los sindicatos no se muestran nada optimistas porque recuerdan que desde que se firma un contrato hasta que se empieza a trabajar en el barco pasan meses y que la situación concreta de Barreras es muy delicada porque tiene a gran parte de la plantilla en ERE y está arrastrando a muchas auxiliares, explicó en rueda de prensa César Rodríguez, secretario nacional del naval de la CIG.
El sindicato nacionalista -mayoritario en el naval- advirtió de que prácticamente el cien por cien de la industria auxiliar viguesa está afectada por un ERE y que en algunos casos ya van por el segundo o incluso negociando el tercero. Recordó, además, que algunos de los grandes astilleros -como Vulcano, Barreras o Polyships- ya están aplicando expedientes de regulación de empleo y que el resto podría tener que recurrir a ellos en cuanto se vayan acabando los contratos -la escasa carga de trabajo que hay en la Ría sólo asegura actividad hasta finales de 2012 o principios de 2013-.
La CIG dice que la situación del naval de la Ría de Vigo es crítica porque en el último año y medio se perdieron unos 7.000 empleos y censuró los compromisos hechos por la Xunta para ayudar a este sector sin concretarse en nada. El sector ha estado siempre prácticamente abandonado por la Administración salvo momentos puntuales en los que se ha actuado fruto de la contestación social.
Hoy está convocada una manifestación en Santiago, a la que están llamados trabajadores del naval de la comarca viguesa y la ferrolana. La protesta es contra la Xunta, a cuyos dirigentes piden que se dejen de pantomimas y fotos y que arreglen esta situación, comentó Xoan Xosé Bouzas, secretario nacional del metal de la CIG.
Astilleros e industria auxiliar emplean en la actualidad a unas 7.000 personas en Galicia, 5.000 en Vigo y el resto en el norte, especialmente en el área de Ferrol. En el primer trimestre del año se presentaron a la Xunta 23 ERE que afectan a 262 trabajadores, la mayoría de la comarca viguesa.
El sindicato nacionalista -mayoritario en el naval- advirtió de que prácticamente el cien por cien de la industria auxiliar viguesa está afectada por un ERE y que en algunos casos ya van por el segundo o incluso negociando el tercero. Recordó, además, que algunos de los grandes astilleros -como Vulcano, Barreras o Polyships- ya están aplicando expedientes de regulación de empleo y que el resto podría tener que recurrir a ellos en cuanto se vayan acabando los contratos -la escasa carga de trabajo que hay en la Ría sólo asegura actividad hasta finales de 2012 o principios de 2013-.
La CIG dice que la situación del naval de la Ría de Vigo es crítica porque en el último año y medio se perdieron unos 7.000 empleos y censuró los compromisos hechos por la Xunta para ayudar a este sector sin concretarse en nada. El sector ha estado siempre prácticamente abandonado por la Administración salvo momentos puntuales en los que se ha actuado fruto de la contestación social.
Hoy está convocada una manifestación en Santiago, a la que están llamados trabajadores del naval de la comarca viguesa y la ferrolana. La protesta es contra la Xunta, a cuyos dirigentes piden que se dejen de pantomimas y fotos y que arreglen esta situación, comentó Xoan Xosé Bouzas, secretario nacional del metal de la CIG.
Astilleros e industria auxiliar emplean en la actualidad a unas 7.000 personas en Galicia, 5.000 en Vigo y el resto en el norte, especialmente en el área de Ferrol. En el primer trimestre del año se presentaron a la Xunta 23 ERE que afectan a 262 trabajadores, la mayoría de la comarca viguesa.
