Los directores generales de Caixanova y Caixa Galicia, José Luis Pego y Javier García de Paredes, se reunieron ayer con los representantes sindicales de las cajas, ante los que han rechazado la privatización de la nueva entidad resultado de la fusión y a los que han lanzado 'un mensaje de diálogo' para la tramitación del ERE que tiene como fin la reducción de plantilla. La cita será el próximo día 25.
A la salida del encuentro, que se prolongó durante una hora en la sede de Caixanova en Santiago de Compostela, el director general de esta entidad y quien será número uno de la nueva caja, José Luis Pego, ha reafirmado que 'la intención' es 'seguir siendo una caja de ahorros'.
Sobre la posible 'bancarización' mediante la emisión de cuotas con derechos políticos, Pego expresó que 'hay una realidad en el entorno' que rodea a las cajas. 'Pero nuestra intención es seguir siendo una caja de ahorros', recalcó.
Sin embargo, previamente, el responsable de CIG-Banca, Clodomiro Montero, destacó que 'este temor no quedó disipado' en la reunión. 'No se renuncia a utilizar esos instrumentos si fuera preciso y, por tanto, no se despeja la incógnita de si realmente el objetivo final va a ser privatizar la entidad', resaltó.
Pese a todo, Pego calificó la reunión como 'positiva' y explicó que tenía 'simplemente' un objetivo 'clarificatorio' respecto a 'algunos equívocos que se podían haber producido en determinados momentos' de la negociación del pacto laboral, firmado por CC.OO. y Csica, que representan al 65 por ciento de la plantilla.
Por su parte, el que será director adjunto de la caja, Javier García de Paredes, subrayó que el objetivo era 'restablecer la norma de diálogo que siempre presidió' las relaciones sindicales de las cajas.
Luis Paz, de Csica, coincidió en una evaluación 'francamente positiva' del encuentro, en el que, según ha dicho, los directivos han trasladado la intención de 'trabajar de la mano de los sindicatos'.
Por UGT, su portavoz, José Ramón De Pliego-Valdés, apreció 'un cambio de actitud' por parte de la dirección de las cajas, pero ha aplazado su valoración porque 'hay que ver si son sólo palabras'.
Sobre la posible 'bancarización' mediante la emisión de cuotas con derechos políticos, Pego expresó que 'hay una realidad en el entorno' que rodea a las cajas. 'Pero nuestra intención es seguir siendo una caja de ahorros', recalcó.
Sin embargo, previamente, el responsable de CIG-Banca, Clodomiro Montero, destacó que 'este temor no quedó disipado' en la reunión. 'No se renuncia a utilizar esos instrumentos si fuera preciso y, por tanto, no se despeja la incógnita de si realmente el objetivo final va a ser privatizar la entidad', resaltó.
Pese a todo, Pego calificó la reunión como 'positiva' y explicó que tenía 'simplemente' un objetivo 'clarificatorio' respecto a 'algunos equívocos que se podían haber producido en determinados momentos' de la negociación del pacto laboral, firmado por CC.OO. y Csica, que representan al 65 por ciento de la plantilla.
Por su parte, el que será director adjunto de la caja, Javier García de Paredes, subrayó que el objetivo era 'restablecer la norma de diálogo que siempre presidió' las relaciones sindicales de las cajas.
Luis Paz, de Csica, coincidió en una evaluación 'francamente positiva' del encuentro, en el que, según ha dicho, los directivos han trasladado la intención de 'trabajar de la mano de los sindicatos'.
Por UGT, su portavoz, José Ramón De Pliego-Valdés, apreció 'un cambio de actitud' por parte de la dirección de las cajas, pero ha aplazado su valoración porque 'hay que ver si son sólo palabras'.
