Un hombre fue juzgado ayer en Vigo, acusado de agredir al novio de su hija, tras encontrárselo dentro de un armario en su propio domicilio. Los hechos se remontan a noviembre de 2011 cuando el imputado llegó a su vivienda y se encontró dentro del armario de la habitación de su hija, escondido, al novio de ésta.
Según el fiscal, el hombre le sacó de allí a la fuerza y le propinó varios golpes en la cara, causándole diversas lesiones que no requirieron tratamiento médico. Además de esa acusación, por la que solicita ocho días de localización permanente, el hombre se enfrenta a una petición de condena de ocho meses de prisión y dos años de alejamiento de su hija por maltrato al golpearla con un cinturón.
El imputado, durante el juicio, en el Penal número 2 de Vigo, reconoció haber sacado al joven del armario por la fuerza, pero negó haberle golpeado, asegurando que los hematomas se los había realizado al darse contra la puerta del mueble. Aseguró asimismo que no aprobaba la relación con su hija ya que ella era menor, tenía 17 años y él diez más.
A raíz de los hechos, la hija denunció a la Policía que su padre le maltrataba y mostró unos moratones en el cuerpo que según dijo entonces se los había hecho su progenitor con un cinturón. Desde entonces, la chica pasó a vivir a un piso tutelado de la Xunta y en la actualidad, ya no mantiene relación alguna con el joven, al que había conocido a través de la iglesia evangelista.
El imputado, durante el juicio, en el Penal número 2 de Vigo, reconoció haber sacado al joven del armario por la fuerza, pero negó haberle golpeado, asegurando que los hematomas se los había realizado al darse contra la puerta del mueble. Aseguró asimismo que no aprobaba la relación con su hija ya que ella era menor, tenía 17 años y él diez más.
A raíz de los hechos, la hija denunció a la Policía que su padre le maltrataba y mostró unos moratones en el cuerpo que según dijo entonces se los había hecho su progenitor con un cinturón. Desde entonces, la chica pasó a vivir a un piso tutelado de la Xunta y en la actualidad, ya no mantiene relación alguna con el joven, al que había conocido a través de la iglesia evangelista.
