El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, denunció la existencia de un agujero que sobrepasa los 600 millones de euros en los ingresos de la Xunta previstos para 2009 y alertó de gastos no presupuestados por el anterior Gobierno en algunas consellerías.
Asimismo, constató que las previsiones macroeconómicas del bipartito son irreales y desfasadas y anunció que, en consecuencia, realizará un reajuste completo de los presupuestos gallegos antes del verano.
Las cuentas no cuadran, sentenció Feijóo tras la reunión semanal del Consello de la Xunta, en la que se analizó un informe sobre la economía gallega coordinado por la conselleira de Facenda, Marta Fernández. A partir de este análisis, Feijóo advirtió de que la situación financiera real de Galicia es mucho peor de lo que PSdeG y BNG dijeron antes de las elecciones autonómicas.
El máximo mandatario gallego subrayó que las previsiones del presupuesto aprobado por el bipartito eran demasiado optimistas y precisó que los datos del Instituto Galego de Estatística (IGE) en los que se basa el informe realizado por su Gobierno evidencian que están completamente desfasadas ya que, lejos del crecimiento del 1,3 por ciento previsto, el organismo prevé un decrecimiento de 2,5 puntos del PIB.
El informe realizado por la Xunta pone de manifiesto también que la previsión de mantener el empleo en Galicia, previsto en las cuentas gallegas para 2009, tampoco se ajusta a la realidad económica de la comunidad. Según explicó Feijóo, sólo en el primer cuatrimestre, el paro se incrementó en 20.759 personas, mientras que la afiliación a la Seguridad Social registró una caída de 11.302 afiliados.
AGUJERO PREOCUPANTE
Además de las previsiones económicas irreales, Feijóo aludió al desajuste de 600 millones en los ingresos de la Xunta y detalló las partidas que han dado lugar al agujero financiero. Así, 235 millones procederían de una bajada en la recaudación de los tributos. La pérdida de otros 355 millones sería atribuible a la disminución de las transferencias corrientes, como los 273 millones del anticipo a cuenta que el Estado no tiene intención alguna de transferir a la comunidad.
Lo más preocupante, según Feijóo, es que este desajuste no es definitivo. En este sentido, precisó que éste podría verse incrementado por la evolución negativa de la economía y de los fondos europeos, que suponen un 10 por ciento de los ingresos de la Xunta.
A mayores, Feijóo advirtió de que el informe inicial realizado por su Gobierno apunta a la existencia de gastos no presupuestados en varios departamentos autonómicos, pero apeló a la prudencia para no concretar estos posibles desvíos hasta que el estudio esté completo. La titular de Facenda concretará los distintos aspectos del estudio --entre ellos, esta tensión de gasto-en una comparecencia parlamentaria, aún sin fecha.
PLAN DE AUSTERIDAD
Tras el análisis, el jefe del Ejecutivo autonómico anunció medidas inmediatas para adecuar las cuentas a la realidad económica de la comunidad y paliar los desajustes presupuestarios. Así, volverá a redactar por completo los presupuestos gallegos, pero también impulsará un plan de austeridad que podría obligar a la Administración gallega a replantear algunos proyectos.
Feijóo eludió concretar qué proyectos podrían quedar paralizados a causa de este plan de austeridad, pero garantizó que se respetará y preservará el gasto social en sanidad, educación y servicios sociales, con especial atención a la dependencia.
DECIR LA VERDAD
Preguntado por las críticas del secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, a la titular de Sanidade, Pilar Farjas, quien acusó al bipartito de no haber consignado presupuesto para el inicio de las obras del Hospital de Vigo, Núñez Feijóo respaldó a la conselleira.
Me gustaría saber dónde está la partida presupuestaria, sentenció y concluyó que siempre cumplirá, al igual que su Gobierno, con la obligación de decir la verdad a los gallegos.
Más allá, el dirigente gallego minimizó las acusaciones de Vázquez contra varios miembros de la Xunta, como el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, y el titular de Presidencia, Alfonso Rueda. Hay críticas que se comentan por sí solas, allá él, resolvió.
Las cuentas no cuadran, sentenció Feijóo tras la reunión semanal del Consello de la Xunta, en la que se analizó un informe sobre la economía gallega coordinado por la conselleira de Facenda, Marta Fernández. A partir de este análisis, Feijóo advirtió de que la situación financiera real de Galicia es mucho peor de lo que PSdeG y BNG dijeron antes de las elecciones autonómicas.
El máximo mandatario gallego subrayó que las previsiones del presupuesto aprobado por el bipartito eran demasiado optimistas y precisó que los datos del Instituto Galego de Estatística (IGE) en los que se basa el informe realizado por su Gobierno evidencian que están completamente desfasadas ya que, lejos del crecimiento del 1,3 por ciento previsto, el organismo prevé un decrecimiento de 2,5 puntos del PIB.
El informe realizado por la Xunta pone de manifiesto también que la previsión de mantener el empleo en Galicia, previsto en las cuentas gallegas para 2009, tampoco se ajusta a la realidad económica de la comunidad. Según explicó Feijóo, sólo en el primer cuatrimestre, el paro se incrementó en 20.759 personas, mientras que la afiliación a la Seguridad Social registró una caída de 11.302 afiliados.
AGUJERO PREOCUPANTE
Además de las previsiones económicas irreales, Feijóo aludió al desajuste de 600 millones en los ingresos de la Xunta y detalló las partidas que han dado lugar al agujero financiero. Así, 235 millones procederían de una bajada en la recaudación de los tributos. La pérdida de otros 355 millones sería atribuible a la disminución de las transferencias corrientes, como los 273 millones del anticipo a cuenta que el Estado no tiene intención alguna de transferir a la comunidad.
Lo más preocupante, según Feijóo, es que este desajuste no es definitivo. En este sentido, precisó que éste podría verse incrementado por la evolución negativa de la economía y de los fondos europeos, que suponen un 10 por ciento de los ingresos de la Xunta.
A mayores, Feijóo advirtió de que el informe inicial realizado por su Gobierno apunta a la existencia de gastos no presupuestados en varios departamentos autonómicos, pero apeló a la prudencia para no concretar estos posibles desvíos hasta que el estudio esté completo. La titular de Facenda concretará los distintos aspectos del estudio --entre ellos, esta tensión de gasto-en una comparecencia parlamentaria, aún sin fecha.
PLAN DE AUSTERIDAD
Tras el análisis, el jefe del Ejecutivo autonómico anunció medidas inmediatas para adecuar las cuentas a la realidad económica de la comunidad y paliar los desajustes presupuestarios. Así, volverá a redactar por completo los presupuestos gallegos, pero también impulsará un plan de austeridad que podría obligar a la Administración gallega a replantear algunos proyectos.
Feijóo eludió concretar qué proyectos podrían quedar paralizados a causa de este plan de austeridad, pero garantizó que se respetará y preservará el gasto social en sanidad, educación y servicios sociales, con especial atención a la dependencia.
DECIR LA VERDAD
Preguntado por las críticas del secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, a la titular de Sanidade, Pilar Farjas, quien acusó al bipartito de no haber consignado presupuesto para el inicio de las obras del Hospital de Vigo, Núñez Feijóo respaldó a la conselleira.
Me gustaría saber dónde está la partida presupuestaria, sentenció y concluyó que siempre cumplirá, al igual que su Gobierno, con la obligación de decir la verdad a los gallegos.
Más allá, el dirigente gallego minimizó las acusaciones de Vázquez contra varios miembros de la Xunta, como el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, y el titular de Presidencia, Alfonso Rueda. Hay críticas que se comentan por sí solas, allá él, resolvió.