Los tres grupos con representación en la Cámara autonómica --PPdeG, PSdeG y BNG-sellaron un pacto sobre su participación en los plenos, que dejan en iguales condiciones a los socialistas a respecto de la legislatura anterior (cuando apoyaban al Gobierno). Por su parte, los nacionalistas pierden una interpelación en cada sesión plenaria, aunque tanto ellos como las otras dos formaciones, mostraron su satisfacción por el resultado de las conversaciones.
Tras la reunión de la primera Xunta de Portavoces de este periodo de sesiones, que hoy mismo comienza, los portavoces de los tres grupos, que se reunieron ayer para avanzar en este acuerdo, concluyeron que la buena disposición de todas las partes hizo posible este acuerdo que, a su juicio, devolverá la normalidad a la actividad en el Pazo do Hórreo.
En virtud del pacto, los tres grupos podrán presentar dos proposiciones no de ley en cada sesión y 'populares' y socialistas tendrán un cupo de dos interpelaciones, frente a una del Bloque.
Derivadas de las interpelaciones, se presentan las mociones, cuyo cupo para cada formación será igual al de las primeras.
Durante su intervención, el portavoz nacionalista, Carlos Aymerich, atribuyó a la cesión de su grupo --que pedía inicialmente igualdad para todas las formaciones-el éxito del pacto. Al respecto del amparo ante el Constitucional que los nacionalistas advirtieron que demandarían, el diputado afirmó que esperarán a ver cómo se aplica lo acordado para paralizarlo o no.
Por su parte, su homólogo socialista, Xaquín Fernández Leiceaga, expresó su satisfacción por que su grupo permanecerá en igual situación que en los cuatro años anteriores y subrayó que el acuerdo favorecerá el trabajo de oposición.
En esta línea, el 'popular' Manuel Ruiz Rivas destacó que hubo fumata blanca y puso de manifiesto el cambio de principios que este acuerdo --fruto también de la generosidad del PPdeG, dijo- supondrá de ahora en adelante.
CAMBIO DE PRINCIPIOS
Para el portavoz del grupo del PPdeG, este cambio de principios se debe a que, por primera vez en el hemiciclo, se cede a los grupos de la oposición el peso del control al gobierno. Puso como ejemplo de ello que, mientras que PSdeG y BNG acumularán cuatro proposiciones y tres interpelaciones, los 'populares' se quedan con dos de cada.
Asimismo, explicó que este 'fair play' --juego limpio-será de aplicación también en las comisiones e hizo hincapié en la vuelta a la normalidad y estabilidad parlamentaria que otorgará este pacto también para abordar otros asuntos.
COMISIONES
Por otro lado, el grupo parlamentario del PPdeG se comprometió a estudiar sendas propuestas de los socialistas para constituir comisiones no permanentes sobre el futuro de las cajas de ahorros y acerca de la reforma del Estatuto.
Tal y como confirmó Ruiz Rivas, los 'populares' evaluarán ambas iniciativas del PSdeG, cuyo portavoz afirmó que no pasaba nada por esperar 15 días, hasta la próxima Xunta de Portavoces, para conocer la postura de los 'populares' a este respecto.
Fernández Leiceaga argumentó que una comisión para defender la galleguidad de las cajas gallegas debe ser parte del arsenal de trabajo parlamentario para este periodo de sesiones que ahora comienza.
En cuanto a la reforma estatutaria, los socialistas apuestan por que la comisión sirva para realizar un trabajo previo que permita el consenso a tres para relanzar el Estatuto. Sobre este extremo, el portavoz del PPdeG consideró que hay que desembarazarse de los prejuicios y condicionantes.
En este sentido, opinó que hay que estar al lado de los problemas reales de la gente y señaló que la denominación de una comunidad es un problema menor en este momento.
En virtud del pacto, los tres grupos podrán presentar dos proposiciones no de ley en cada sesión y 'populares' y socialistas tendrán un cupo de dos interpelaciones, frente a una del Bloque.
Derivadas de las interpelaciones, se presentan las mociones, cuyo cupo para cada formación será igual al de las primeras.
Durante su intervención, el portavoz nacionalista, Carlos Aymerich, atribuyó a la cesión de su grupo --que pedía inicialmente igualdad para todas las formaciones-el éxito del pacto. Al respecto del amparo ante el Constitucional que los nacionalistas advirtieron que demandarían, el diputado afirmó que esperarán a ver cómo se aplica lo acordado para paralizarlo o no.
Por su parte, su homólogo socialista, Xaquín Fernández Leiceaga, expresó su satisfacción por que su grupo permanecerá en igual situación que en los cuatro años anteriores y subrayó que el acuerdo favorecerá el trabajo de oposición.
En esta línea, el 'popular' Manuel Ruiz Rivas destacó que hubo fumata blanca y puso de manifiesto el cambio de principios que este acuerdo --fruto también de la generosidad del PPdeG, dijo- supondrá de ahora en adelante.
CAMBIO DE PRINCIPIOS
Para el portavoz del grupo del PPdeG, este cambio de principios se debe a que, por primera vez en el hemiciclo, se cede a los grupos de la oposición el peso del control al gobierno. Puso como ejemplo de ello que, mientras que PSdeG y BNG acumularán cuatro proposiciones y tres interpelaciones, los 'populares' se quedan con dos de cada.
Asimismo, explicó que este 'fair play' --juego limpio-será de aplicación también en las comisiones e hizo hincapié en la vuelta a la normalidad y estabilidad parlamentaria que otorgará este pacto también para abordar otros asuntos.
COMISIONES
Por otro lado, el grupo parlamentario del PPdeG se comprometió a estudiar sendas propuestas de los socialistas para constituir comisiones no permanentes sobre el futuro de las cajas de ahorros y acerca de la reforma del Estatuto.
Tal y como confirmó Ruiz Rivas, los 'populares' evaluarán ambas iniciativas del PSdeG, cuyo portavoz afirmó que no pasaba nada por esperar 15 días, hasta la próxima Xunta de Portavoces, para conocer la postura de los 'populares' a este respecto.
Fernández Leiceaga argumentó que una comisión para defender la galleguidad de las cajas gallegas debe ser parte del arsenal de trabajo parlamentario para este periodo de sesiones que ahora comienza.
En cuanto a la reforma estatutaria, los socialistas apuestan por que la comisión sirva para realizar un trabajo previo que permita el consenso a tres para relanzar el Estatuto. Sobre este extremo, el portavoz del PPdeG consideró que hay que desembarazarse de los prejuicios y condicionantes.
En este sentido, opinó que hay que estar al lado de los problemas reales de la gente y señaló que la denominación de una comunidad es un problema menor en este momento.