El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, se comprometió hoy a asumir las conclusiones de la comisión de investigación sobre una presunta agente electoral socialista, pero pidió que se deje que los diputados hagan su trabajo, por lo que evitó pronunciarse acerca de cómo transcurren las comparecencias.
No voy a entrar en lo que se dice o no se dice en el órgano parlamentario, enfatizó tras ser preguntado sobre si se depurarán responsabilidades políticas después de que la supuesta agente ratificase ayer sus acusaciones.
María Isabel Blanco aseguró en la Cámara que trabajó a las órdenes del alcalde socialista de Muxía, Félix Porto, para recabar votos en la emigración. De hecho, admitió que pidió puerta a puerta el voto para el candidato socialista, que facilitó solicitudes de sufragio a los emigrantes y que incluso los rellenó y los recogió en algunas ocasiones.
En todo caso, el presidente señaló que él impulsó la constitución de este foro, que se creó con el voto favorable de los tres grupos parlamentarios, y opinó que se trata de una decisión acertada y positiva. Así, incidió en que no realizará evaluaciones sobre sus trabajos, aunque reafirmó su compromiso de asumir sus conclusiones.
VIAJE ESCRUPULOSO.
Además, defendió el escrupuloso carácter institucional de su reciente viaje a Argentina y a Brasil, frente a las críticas del presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, que le acusó de aprovechar su estancia en el cono sur con fines partidistas. Así, achacó estos reproches a la obstinación del líder de la oposición y tachó su posicionamiento de lamentable.
En esta línea, Touriño insistió en que fue respetuoso con la división entre su función como presidente autonómico y como secretario xeral del PSdeG y, de hecho, enfatizó que casi no habló de política. Por ello, consideró como de mal gusto y una falta de rigor que un dirigente que aspira a presidir la Xunta realice estas críticas.
Yo lo que no hago es repartir ningún cheque, ni de cerca ni de lejos, apuntó, en alusión a la entrega de un documento de la Diputación de Pontevedra por parte de un colaborador de Núñez Feijóo al Centro Gallego de México.
María Isabel Blanco aseguró en la Cámara que trabajó a las órdenes del alcalde socialista de Muxía, Félix Porto, para recabar votos en la emigración. De hecho, admitió que pidió puerta a puerta el voto para el candidato socialista, que facilitó solicitudes de sufragio a los emigrantes y que incluso los rellenó y los recogió en algunas ocasiones.
En todo caso, el presidente señaló que él impulsó la constitución de este foro, que se creó con el voto favorable de los tres grupos parlamentarios, y opinó que se trata de una decisión acertada y positiva. Así, incidió en que no realizará evaluaciones sobre sus trabajos, aunque reafirmó su compromiso de asumir sus conclusiones.
VIAJE ESCRUPULOSO.
Además, defendió el escrupuloso carácter institucional de su reciente viaje a Argentina y a Brasil, frente a las críticas del presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, que le acusó de aprovechar su estancia en el cono sur con fines partidistas. Así, achacó estos reproches a la obstinación del líder de la oposición y tachó su posicionamiento de lamentable.
En esta línea, Touriño insistió en que fue respetuoso con la división entre su función como presidente autonómico y como secretario xeral del PSdeG y, de hecho, enfatizó que casi no habló de política. Por ello, consideró como de mal gusto y una falta de rigor que un dirigente que aspira a presidir la Xunta realice estas críticas.
Yo lo que no hago es repartir ningún cheque, ni de cerca ni de lejos, apuntó, en alusión a la entrega de un documento de la Diputación de Pontevedra por parte de un colaborador de Núñez Feijóo al Centro Gallego de México.
