El juicio que enfrenta a John Travolta con un médico y una antigua senadora, acusados de extorsionarle tras la muerte de su hijo el pasado mes de enero, dará comienzo esta semana. El actor se enfrentará a uno de los momentos más difíciles después del fallecimiento de su hijo Jett, ya que deberá testificar en el mismo.
El técnico de ambulancias Tarino Lightbourn y la antigua senadora Pleasant Bridgewater están acusados de haber intentado extorsionar a John Travolta días después de la muerte de su hijo mayor, quien falleció mientras se encontraba de vacaciones con su familia en la isla de Gran Bahama. Éstos reclamaron 25 millones de dólares al actor, a cambio de hacer no público un documento que, irónicamente, no tiene ninguna relevancia.
Al parecer, el documento es un orden, supuestamente firmada por Travolta, que exime de toda responsabilidad al equipo de la ambulancia si el paciente no quiere ser trasladado a un hospital. De ser cierto, podría culparse al actor de haber dejado morir a su hijo a causa de sus estrictas creencias religiosas, las cuales le impedirían recibir tratamiento médico. El protagonista de Pulp Fiction es un reconocido miembro de la Cienciología.
Sin embargo, Jett Travolta, de 16 años, falleció de un ataque al corazón sin posibilidad de reanimación alguna. El joven padecía el síndrome de Kawasaki, enfermedad que conlleva una inflamación de las arterias. Además, sufría asma.
John Travolta denunció, dos semanas después del trágico incidente, que Lighbourn y Bridgewater se habían puesto en contacto con él y habían intentado venderle el documento. Sin embargo, ambos imputados se han declarado inocentes de los cargos de extorsión.
En los próximos días Travolta deberá viajar a las Bahamas y dar un testimonio que, según ha declarado una fuente al portal TZM, será muy emotivo.
La primera aparición pública de la familia después de la muerte de Jett se produjo la pasada semana para promocionar su próxima película Old Dogs, en la que también han participado su mujer Kelly Preston y la hija de ambos Ella Bleu, de tan sólo nueve años.
El film, en el que también aparece Robin Williams, se estrenará el próximo noviembre en Estados Unidos.
'Espero que os guste tanto como a mí. En parte me gusta mucho porque está mi pequeña en ella', declaró Travolta sobre la película. Sin embargo, no se pronunció a cerca del juicio en el que deberá tomar parte en los próximos días.
Al parecer, el documento es un orden, supuestamente firmada por Travolta, que exime de toda responsabilidad al equipo de la ambulancia si el paciente no quiere ser trasladado a un hospital. De ser cierto, podría culparse al actor de haber dejado morir a su hijo a causa de sus estrictas creencias religiosas, las cuales le impedirían recibir tratamiento médico. El protagonista de Pulp Fiction es un reconocido miembro de la Cienciología.
Sin embargo, Jett Travolta, de 16 años, falleció de un ataque al corazón sin posibilidad de reanimación alguna. El joven padecía el síndrome de Kawasaki, enfermedad que conlleva una inflamación de las arterias. Además, sufría asma.
John Travolta denunció, dos semanas después del trágico incidente, que Lighbourn y Bridgewater se habían puesto en contacto con él y habían intentado venderle el documento. Sin embargo, ambos imputados se han declarado inocentes de los cargos de extorsión.
En los próximos días Travolta deberá viajar a las Bahamas y dar un testimonio que, según ha declarado una fuente al portal TZM, será muy emotivo.
La primera aparición pública de la familia después de la muerte de Jett se produjo la pasada semana para promocionar su próxima película Old Dogs, en la que también han participado su mujer Kelly Preston y la hija de ambos Ella Bleu, de tan sólo nueve años.
El film, en el que también aparece Robin Williams, se estrenará el próximo noviembre en Estados Unidos.
'Espero que os guste tanto como a mí. En parte me gusta mucho porque está mi pequeña en ella', declaró Travolta sobre la película. Sin embargo, no se pronunció a cerca del juicio en el que deberá tomar parte en los próximos días.
