“Red Dead Redemption 2”, de Rockstar Games, supone un salto de calidad respecto al mítico “Grand Theft Auto V” con un enorme respeto por el jugador y cuidado por los detalles
Cada cierto tiempo aparece en el mercado un juego revolucionario, una aventura que por sí misma redefine géneros y avanza un poco más hacia una experiencia perfecta y equilibrada entre narración, jugabilidad, historia y libertad de deciciones.
Rockstar Games, creadores del hasta ahora incontestable “Grand Theft Auto V” y “Red Dead Redemption”, llega “Red Dead Redemption 2”, una impresionante historia sobre la vida americana en los albores de la era moderna, y que es, por méritos propios, uno de los mejores juegos de los últimos años.
Después de que un atraco se vaya al traste en la ciudad de Blackwater, Arthur Morgan y la banda de Van der Linde se ven obligados a huir. Con los agentes federales y los mejores cazarrecompensas de la nación pisándoles los talones, deberán atracar, robar y abrirse camino a la fuerza por el implacable corazón de América para poder sobrevivir. A medida que las divisiones internas amenazan con despedazar la banda, Arthur debe elegir si ser fiel a sus propios ideales o a la banda que lo vio crecer.
Tras este argumento “Red Dead Redemption 2” esconde una enorme aventura que ofrece total libertad a los jugadores, que pueden seguir la dinámica del argumento principal o bien crear su propia historia. El cuidado por los detalles, las posibilidades de un mundo abierto interactivo y un Salvaje Oeste tan vivo como sorprendente no sólo está a la altura de lo ya vivido con “Grand Theft Auto V”, sino que lo supera en muchos aspectos, con zonas ocultas del mapeado que incluso permiten visitar México.
Una aventura de proporciones épcas que marcará por su jugabilidad a toda una generación de jugadores .
