Aparcar en algunas zonas de las ciudades o las villas españolas a veces se convierte en una auténtica odisea. En esas ocasiones no es extraño ver a alguna persona de pie sobre un hueco en el que se podría meter el coche, pero esa acción no es legal y podría costarle un poco caro a la persona que lo hace.
Según la DGT, si existe un refugio, como una zona peatonal o otro espacio adecuado, los peatones no pueden estar detenidos en el arcén ni en la calzada. Por lo tanto, los peatones no pueden tampoco esperar a un coche, por lo que tendrán que permanecer apartados a que llegue el vehículo. Por lo tanto, tampoco se podrá quedar quieto en un lugar reservado para un aparcamiento hasta que llegue un conocido, especialmente si ese hueco lo quiere ocupar otra persona antes.
Un particular podría avisar a las autoridades de esa incidencia, que podría conllevar una multa de 80 euros.
