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Desde 1911 que tuvo lugar el Rally de Montecarlo, en el Principado de Mónaco, considerado como el primer rally en la historia de este deporte, una enorme cantidad de fantásticos pilotos han asombrado con sus habilidades a los hinchas del motor. Sin embargo no solo fueron los pilotos los que emocionaron a los hinchas, los coches han sido de siempre uno de los aspectos más característicos, pues el piloto va en su interior con varias protecciones y no es tan visible de cara al público. Puede que los mejores coches no hubiesen llegado tan lejos de manos de otro piloto, pero sin duda, ha habido algún vehículo que ha demostrado las maravillas de las que son capaces en este deporte.
Es muy complicado hacer distinciones entre los vehículos de rally para determinar cual es el mejor, pues de año en año, las especificaciones de estos coches mejoran sobremanera, por lo que, el mejor vehículo de allá por 1911 no tendría nada que hacer contra uno de nivel medio en 2023, sin embargo, no resta mérito las condiciones que tenía por aquel entonces, algo que se valorará en esta lista.
Audi Quattro S1
Uno de los vehículos más emblemáticos del rally, tanto así, que incluso fue introducido en un videojuego que no es de carreras como tal, el GTA V, donde se le llamó Omnis y puede ser decorado de manera similar al pilotado por Stig Blomqvist en el Rally de Argentina de 1985. Este vehículo marcó un antes y un después, ya que su tracción total fue el comienzo de una transición de la tracción trasera que se venía utilizando en las competiciones.
Volkswagen Polo R WRC
Construido por Volkswagen para competir en el Campeonato Mundial de Rally en 2013, año en el que el fabricante debutó, logró el campeonato de constructores en los años 2013, 2014, 2015 y 2016, además de haber logrado también el campeonato de pilotos durante estos años pilotado por el piloto francés Sébastien Ogier.
Citroën C4 WRC
El coche de Citroën, la casa con más títulos de campeonato de constructores -dos con el Xsara WRC y dos con el DS3 WRC- logró llevarse cuatro más. Pilotado por el piloto francés, Sébastien Loeb, quién logró llevarse los campeonatos desde 2007 hasta 2010. Con un motor de 2 litros con 315 CV, el piloto francés logró 36 victorias en las 56 competiciones en las que participó con este coche.
Subaru Impreza
Un coche que se introdujo en el competitivo de la mano de Carlos Sainz en 1994 y fue pilotado por Colin McRae, uno de los pilotos más conocidos en el mundo del rally. Logró el campeonato de constructores en 1995, 1996 y 1997, llevándose también estos años el campeonato de piloto, en 1995 con Colin McRae a los mandos y en 1996 y 1997 con Tommi Mäkinen.
Alpinche
Esta lista no estaría bien sin remarcar el orgullo de Ourense, ciudad en la que tiene lugar el Rally de Ourense, una de las jornadas de rally más importantes a nivel nacional. El Alpinche, construido por el ourensano Estanislao Reverter en su garaje fusionando dos vehículos: la carrocería del Alpine y el motor Porsche, era pilotado por su propio constructor, hasta que, a causa de un incendio, vio sus capacidades físicas deterioradas al sacrificarse para salvar su obra. Tras prohibir a los prototipos competir, el Alpinche se guardó en una nave hasta que, el año pasado, finalizó su restauración y volvió a lucir en las calles ourensanas.