La Policía filipina desactivó hoy un pequeño artefacto explosivo hallado en el aeropuerto que acoge a la mayoría de los turistas que viajan a la isla de Boracay, uno de los mayores reclamos turísticos del archipiélago.
El portavoz de la Policía, el superintendente Agrimero Cruz, afirmó que el personal de seguridad encontró la bomba la noche del martes entre la mercancía que estaba siendo cargada en el aeropuerto de Kalibo, en la isla de Panay.
El artefacto apareció en el mostrador de una empresa de carga de mercancías y debía ser enviada a la isla de Mindanao, en la que operan guerrilleros musulmanes y terroristas islamistas, indicó el policía.
Cruz explicó que los artificieros de la Policía colocaron el artefacto dentro de un sobre de plástico de pequeño tamaño y lo llevaron al exterior del aeródromo para detonarlo.
La Policía ha iniciado una investigación para averiguar de dónde proviene el artefacto.
'No tenemos datos sobre los posibles responsables', señaló Cruz.
El aeropuerto internacional de Kalibo es una de las principales puertas de entrada para turistas extranjeros que viajan a la paradisiaca isla de Boracay, el punto turístico más conocido de Filipinas.
Según las estadísticas gubernamentales, más de 900.000 turistas nacionales y extranjeros visitaron Boracay el pasado año.
