DENUNCIA POR DESOBEDIENCIA

El alcalde de Boborás, 'tranquilo' tras declarar como imputado

O Carballiño. 05-03-15. Local. Declaración do alcalde de Boborás no xulgado
Foto: Xesús Fariñas
photo_camera El alcalde de Boborás, Cipriano Caamaño, este jueves ante el Pazo de Xustiza de Carballiño. (XESÚS FARIÑAS)

Cipriano Caamaño y el arquitecto municipal declararon este jueves en la instrucción abierta por una denuncia de la Fiscalía por desobediencia

El alcalde de Boborás, Cipriano Caamaño (PP), ha dicho que está "tranquilo por haber hecho todo correctamente", tras declarar como imputado en el juzgado de O Carballiño, a raíz de la denuncia por desobediencia presentada por la Fiscalía de Urbanismo de Ourense, por no ejecutar una resolución de demolición emitida por el propio Ayuntamiento de Boborás en el año 2011.

Caamaño y el que era arquitecto municipal declararon en relación a la obra de un vecino de Pazos de Arenteiro para cubrir parte de un patio común a varias viviendas, situadas muy cerca de la iglesia del pueblo, declarado conjunto histórico-artístico.

La obra fue "ilegal por invadir un patio común a varios inmuebles", según recuerda la denuncia de la Fiscalía, a la que tuvo acceso Europa Press. El alcalde de Boborás desde 1987 --que está confirmado que repetirá como candidato del PP en las próximas municipales-- argumentó que lo que hizo fue "confiar en los técnicos y alguien interpretó mal estas acciones".

El núcleo de Pazos de Arenteiro fue declarado Bien de Interés Cultural en 1981, por lo que una intervención urbanística precisa autorización de la dirección general de Patrimonio, y en este caso, la ausencia de ese permiso determinó una resolución del propio ayuntamiento, que ordenó la demolición en 2011.

Vecinos de las viviendas afectadas por la obra denunciaron que el ayuntamiento, tras ordenar la demolición de la construcción "no la ejecutó", según la documentación a la que tuvo acceso Europa Press. Los afectados denunciaron en el juzgado de lo contencioso la "inactividad de la administración local" y una sentencia judicial de marzo de 2013 condenó al Ayuntamiento de Boborás a la ejecución de la demolición que él mismo había resuelto.

VEINTE DÍAS PARA DEMOLER

Ante una nueva petición vecinal, el juzgado ordenó la "ejecución forzosa de la sentencia de demolición" y dio 20 días al ayuntamiento para hacerlo. A finales de 2013, según recoge la denuncia, se hizo una demolición parcial "y sin presentación previa del proyecto de demolición ante la Dirección General de Patrimonio", por lo que el ayuntamiento de Boborás recibió orden de "paralizar la obra de demolición", en enero de 2014.

Según la denuncia de fiscalía, además de la demolición parcial sin autorización se hizo "una nueva terraza que no existía en la vivienda original y contraviene la sentencia dictada por el contencioso-administrativo de Ourense".

El Ayuntamiento de Boborás recibió varios requerimientos desde 2013, en los que Patrimonio pide a la Administración local el proyecto de reposición de la obra al estado originario, "pues el remitido recoge datos que no se corresponden con la realidad", se le informa de que debe ejecutar la sentencia del juzgado, se le ordena que paralice las obras de demolición que carecen de autorización de la Xunta y, en agosto de 2014, le pide respuestas a todo lo solicitado.

Según la Fiscalía, "a pesar de tener conocimiento" de la sentencia judicial y de los sucesivos requerimientos de Patrimonio, el Ayuntamiento de Boborás "ha obviado su obligación de colaborar con la Administración de Justicia de manera reiterada", por lo que le imputa un posible delito de desobediencia.

IMPUTADOS

Acerca de su declaración como imputado, el alcalde de Boborás dijo que está "encantado de colaborar para aclarar todo". Valoró las obras de demolición ordenadas por el juzgado en unos 600 euros y recordó que días antes de acudir al juzgado, se hizo una segunda demolición "parcial" con proyecto de obra autorizado por Patrimonio.

Fuentes del caso indicaron que, en su declaración, el alcalde explicó que su papel era el de "firmar" y que "desconocía" la sentencia y los posteriores requerimientos. En ese sentido, se refirió al técnico de Urbanismo y al que fue secretario municipal hasta hace tres semanas como los responsables de atender lo que llega al ayuntamiento.

También declaró como imputado este jueves el arquitecto municipal. El tercer imputado citado es el autor del proyecto de demolición parcial de la obra, contratado por el propietario que la hizo, pero excusó su ausencia y está pendiente de ser citado para otro día para declarar.

Te puede interesar