La madre de uno de los tres niños que recogió la Policía Local de Carballiño el pasado lunes en el entorno de A Veracruz después de haber perdido el autobús escolar, declaraba ayer a La Región que 'asumo la responsabilidad de no haber esperado a que subiera al autobús, pero el colegio tampoco nos llamó a ninguna de las tres familias para informarnos de que faltaban los niños, yo estaba en un lugar sin cobertura y no supe nada hasta las 14,00 horas en que vi la llamada de la policía'.
La mujer, que prefiere no hacer público su nombre para no perjudicar a su hijo, asegura que se llevó un buen susto porque pensó que su marido o su hijo habían tenido un accidente, añadiendo que 'no me parece normal que no los dejaran entrar en el colegio'.
La policía había trasladado a los niños hasta A Uceira, pero a la vista de que no les permitieron entrar en clases, los agentes los llevaron hasta las dependencias de la policía en donde permanecieron hasta que localizaron a los familiares. El reglamento interno, que impide el acceso al centro fuera del horario establecido, es el motivo por el que el centro cierra sus puertas. La madre manifestaba que está en contra, porque 'para ir al médico podría pedir una hora en el trabajo y después llevarlo al colegio, pero con esta norma tengo que pedir toda la mañana, porque no dejan pasar fuera del horario, salvo en el recreo'.
LA DIRECCIÓN INSISTE
La dirección del centro, no obstante, sigue contradiciendo la versión de los agentes, asegurando que la patrulla no solicitó dejar allí a los niños, sino únicamente los datos de los padres. Ante las distintas versiones de los hechos el responsable máximo de la Policía Local, Francisco Valeiras, solicitó a los agentes que llevaron este asunto una ampliación de diligencias para detallar todo lo ocurrido.
Según informa el Concello, una profesora, junto con uno de los agentes y los niños, pasaron al despacho de la directora y 'cuando se le facilitan al agente los datos de los padres e iba a salir del despacho, la profesora pregunta si se quedan los niños en el colegio y la directora responde que no', indican las diligencias, por cuyo motivo los niños pasaron a las dependencias policiales.
La policía había trasladado a los niños hasta A Uceira, pero a la vista de que no les permitieron entrar en clases, los agentes los llevaron hasta las dependencias de la policía en donde permanecieron hasta que localizaron a los familiares. El reglamento interno, que impide el acceso al centro fuera del horario establecido, es el motivo por el que el centro cierra sus puertas. La madre manifestaba que está en contra, porque 'para ir al médico podría pedir una hora en el trabajo y después llevarlo al colegio, pero con esta norma tengo que pedir toda la mañana, porque no dejan pasar fuera del horario, salvo en el recreo'.
LA DIRECCIÓN INSISTE
La dirección del centro, no obstante, sigue contradiciendo la versión de los agentes, asegurando que la patrulla no solicitó dejar allí a los niños, sino únicamente los datos de los padres. Ante las distintas versiones de los hechos el responsable máximo de la Policía Local, Francisco Valeiras, solicitó a los agentes que llevaron este asunto una ampliación de diligencias para detallar todo lo ocurrido.
Según informa el Concello, una profesora, junto con uno de los agentes y los niños, pasaron al despacho de la directora y 'cuando se le facilitan al agente los datos de los padres e iba a salir del despacho, la profesora pregunta si se quedan los niños en el colegio y la directora responde que no', indican las diligencias, por cuyo motivo los niños pasaron a las dependencias policiales.
