Acoge a 26 escolares y necesita voluntarios para atender a otros 15 que tiene en lista de espera.
El servicio de apoyo escolar que puso en marcha la Cruz Roja de Carballiño el pasado curso está resultando un éxito, tanto por los resultados positivos de los niños en sus respectivos colegios como por la demanda que ha suscitado entre las familias con dificultades económicas puesto que es totalmente gratuito. Se iniciaba el año pasado con 6 escolares y en la actualidad hay 26, con edades comprendidas entre los 5 y 16 años, al mismo tiempo que hay una lista de espera que ronda los 15.
Este ha sido el motivo de que el presidente de la agrupación local, Modesto Ojea, decidiese ampliar la sede ubicada en la Praza Maior, alquilando un segundo local colindante, con el que ha doblado la superficie disponible hasta casi 200 metros cuadrados. Al principio, el apoyo escolar se prestaba en las instalaciones del Cornuval, en las afueras de la villa, pero era demasiado costoso e incómodo disponer de transporte. Una vez que ya se cuenta con suficiente espacio en el centro, falta ahora que se sumen más voluntarios a fin de acoger a los escolares que están a la espera.
El número de voluntarios ronda los 300, aunque es un centenar el que se mantiene a diario activo para el desarrollo de las múltiples actividades que se organizan a lo largo del año. En apoyo escolar están 24 y se necesitan otros 10, "que quede claro que no es para impartir clases sino para ayudar con los deberes", puntualiza Ojea. Paralelamente un grupo de seis jóvenes también ayudan a estudiantes de 16 a 18 años un día a la semana.
Además, un total de 270 mayores asisten a diversos talleres y 180 familias reciben todo tipo de ayudas para cubrir carencias básicas. n
