Plan de recuperación para los accesos deteriorados del rural

El equipo municipal de gobierno de Carballiño elaborará un plan de revisión del estado de los viales secundarios en la periferia del casco urbano y las parroquias del rural, que están a generar quejas entre peatones y automovilistas, y que en algún caso no pasan por ellos para evitar posibles averías o cualquier tipo de accidente.
Este es el caso de las pistas que la Consellería de Obras Públicas abrió hace casi 20 años, durante la construcción del Eixo do Ribeiro, para dar servicio a más de 300 vecinos de las localidades de Torrón, Centeás, As Caldas, Partovia y Señorín, en el municipio de Carballiño, y Santián, de Maside.

El deterioro de estos accesos paralelos al citado enlace entre Ribadavia y A Barrela (Lugo), impide actualmente la circulación de vehículos, ya que las piedras y los baches hace tiempo que sustituyeron al firme de asfalto. Así, los conductores evitan pasar por estas pistas para llegar hasta la carretera N-541 (Ourense-Pontevedra), a pesar de estar situada a tan sólo un kilómetro de distancia, y prefieren dar un rodeo de hasta tres kilómetros a través del casco urbano de Carballiño.

El concejal de Obras, Magín Daparte, adelantó que 'os técnicos municipais revisarán e farán unha relación dos viales que están deteriorados'. A partir de este estudio, elaborarán los proyectos de mejora correspondientes, que serán incluidos en partidas de los presupuestos de este año.

Te puede interesar