El Concello de San Amaro inicia los trabajos encaminados a la redacción de un Plan Básico Autonómico (PBA), un instrumento de planeamiento urbanístico con el que el gobierno de la Xunta de Galicia está impulsando una ordenación responsable y sostenible del territorio.
Con tal motivo, el alcalde Fernando Rodríguez Redondo, mantuvo en estos días pasados una reunión en Santiago con la directora xeral de Ordenación do Territorio e Urbanismo, Encarnación Díaz Rivas, en la que participaron técnicos autonómicos y también de la empresa adjudicataria de la redacción del proyecto. Con las cartografías ya disponibles, señala el regidor municipal, que se ponen ahora en marcha los trabajos en cada una de las parroquias de San Amaro para delimitar las zonas urbanas y las zonas rústicas, con el fin de que los vecinos u otras personas que quieran construir o rehabilitar para asentarse en este municipio, tengan claro en qué lugares se puede hacer.
Rodríguez Redondo señala que solo en el núcleo de San Amaro hay tres proyectos de nueva construcción que en estos momentos no se pueden ejecutar. “Pretendemos que calquera que queira facer unha casa ou ampliar un inmueble, que o que teña en San Amaro sexan vetaxes e non dificultades como as que temos agora por non dispoñer de planeamiento urbanístico”, matizó el regidor municipal. “Como alcalde é unha satisfacción o feito de que algo que iniciei no 2019, na anterior etapa de goberno, vexa pronto a luz”, añade.
El Plan Básico Autonómico que impulsa el Concello de San Amaro es una herramienta promovida por la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, pensada para ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes, que no cuentan con planeamiento urbanístico general.
Fases
Así, el plan se desarrollará en cinco fases, fijando dos meses de trabajo en cada una de ellas, empezando por los trabajos de campo en cada parroquia y la elaboración de planos, para continuar con la redacción del borrador y del documento ambiental estratégico y estudio del paisaje. Seguidamente, tras las correspondientes correcciones y ajustes será presentada la versión inicial del plan al que se podrán presentar alegaciones.
La siguiente fase tiene que ver con los informes sectoriales necesarios y la resolución de las alegaciones, para su integración si se considera adecuado en el plan. Finalmente, deberá ser informado por la Comisión superior de urbanismo para su aprobación definitiva.
Todo este proceso tendrá una duración de aproximadamente 10 meses, según los cálculos del equipo técnico.
