Condenado por la tenencia de una pistola, en perfectos estado de funcionamiento
Manuel Rodríguez Fernández, de 85 años, ha sido condenado a un año de prisión por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de O Barco por la tenencia de una pistola, en perfectos estado de funcionamiento, en el interior de su vivienda familiar de Santoalla (Petín). El octogenario es el padre de los dos imputados por el crimen del holandés Marin Verfondern el 19 de enero de 2010: Juan Carlos Rodríguez, en calidad de autor material, y su hermano Carlos como encubridor.
La sentencia, que fue de conformidad en el contexto de un juicio rápido, falla el hallazgo por parte de la Guardia Civil de la pistola (marca Llama del calibre 7,65 mm) cuando el 1 de diciembre de 2014 registró la casa en el marco de la investigación abierta por el homicidio del holandés. Además, había un cargador con siete cartuchos, dos de ellos percutidos.
