Un vecino de la localidad carballiñesa de Partovia alertó a la asociación ecologista Coto do Frade de la existencia de un vertido de aguas fecales en el río Carrás y en las inmediaciones de la Estación Depuradora de Residuales (EDAR). Los ecologistas se desplazaron hasta la zona y comprobaron que el vertido procedía del interior de las instalaciones de depuración., según aseguraron. Así, solicitaron la presencia de una patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y de agentes del Servizo de Conservación da Natureza de la Xunta, para formular la correspondiente denuncia.
Sin embargo, cuando éstos hicieron acto de presencia, el vertido ya había desaparecido, tal y como señaló el concejal de Medio Ambiente de Carballiño, Jesús Rodríguez. No obstante, los agentes citados revisarán el entorno y abrirán una investigación para conocer si las aguas fecales procedían de la depuradora o del propio cauce del río Carrás. Al respecto, el propio edil carballiñés manifestó que los responsables de Aquagest, empresa que gestiona la estación, 'dixéronme que o verquido non se producira dende o interior das instalacións'.
El Gobierno bipartito de la Xunta financió durante tres años el proyecto de la depuradora y de los colectores de aguas residuales, con una inversión de ocho millones de euros.
El Gobierno bipartito de la Xunta financió durante tres años el proyecto de la depuradora y de los colectores de aguas residuales, con una inversión de ocho millones de euros.
