La Casa do Concello de Leiro fue objeto de un robo en la madrugada del jueves. Concretamente, desaparecieron dos ordenadores portátiles, aún pendientes de valoración, y 150 euros en metálico que estaban depositados en las oficinas municipales.
Los hechos fueron descubiertos por el secretario municipal cuando abrió las puertas del consistorio a primera hora del jueves, día 16 de diciembre. El funcionario comprobó como una ventana exterior había sido violentada, así como varias puertas de acceso interior a las oficinas, mientras algunas mesas aparecían revueltas. Finalmente, notó la falta de dos ordenadores portátiles y una cantidad de dinero que se guardaba en el cajón de una mesa.
El alcalde, Francisco José Fernández, señaló que 'este diñeiro seguramente corresponde ó cobro dalgunha taxa ou unha licencia que veu abonar un veciño do municipio'. El regidor también apuntó que 'os portátiles utilizábanos os funcionarios para traballar cando se desplazaban a outras dependencias ou fóra da Casa do Concello', mientras se extrañaba de que 'a persoa ou persoas que entraron non tocaron os ordenadores fixos nin outro mobiliario ou material depositado nas oficiñas'.
Así, la sustracción tuvo escasa repercusión en el funcionamiento del Concello, que retomó su ritmo habitual tras la pertinente inspección ocular realizada por los agentes de la Guardia Civil.
El alcalde, Francisco José Fernández, señaló que 'este diñeiro seguramente corresponde ó cobro dalgunha taxa ou unha licencia que veu abonar un veciño do municipio'. El regidor también apuntó que 'os portátiles utilizábanos os funcionarios para traballar cando se desplazaban a outras dependencias ou fóra da Casa do Concello', mientras se extrañaba de que 'a persoa ou persoas que entraron non tocaron os ordenadores fixos nin outro mobiliario ou material depositado nas oficiñas'.
Así, la sustracción tuvo escasa repercusión en el funcionamiento del Concello, que retomó su ritmo habitual tras la pertinente inspección ocular realizada por los agentes de la Guardia Civil.
