Correos no cubrió plazas en trece municipios ourensanos una vez jubilados sus titulares

Cartero rural, una profesión en extinción en la provincia

Una cartera repartiendo correspondencia en la ciudad. (Foto: MIGUEL ÁNGEL)
Sandiás, A Derrasa (Pereiro de Aguiar), Baños de Molgas, Ribadavia, Castrelo do Miño, Trives, Viana, Bande, Padrenda, Muíños, Lobios, Carballiño, Monterrei y Coles son algunos de los municipios ourensanos en los que Correos no cubrió plazas de carteros rurales una vez que se jubiló su titular.
El reparto de correspondencia fue asumido por sus compañeros, lo que provoca que en la mayoría de los casos tengan que recorrer hasta 30.000 kilómetros al año para llevar las cartas a sus destinatarios. Además, la empresa no cubre con personal contratado temporalmente las bajas del personal fijo en las carterías de A Valenzá (Barbadás), Castro Caldelas, Ourense o San Cibrao.

Los representantes sindicales CC.OO., CSI-F y Sindicato Libre acaban de iniciar un proceso de movilizaciones para protestar contra la falta de personal e inversiones en las distintas carterías. La protesta se hará sentir en Ourense el próximo día 6 de abril con un “apagón postal”, en el que no habrá reparto. Además, los sindicatos tienen previsto realizar una gran protesta a nivel nacional durante el próximo mes de junio. “Las inversiones de Correos en la provincia durante el año pasado fueron presupuestadas en 1.240.000 euros y sólo se gastaron 765.000. El presupuesto del 2010 es de 784.000 euros, un 37% menos que otros años”, aseguró el delegado sindical de CC.OO, Francisco Rodríguez.
Este sindicato alerta ademásde que el Gobierno no tiene un modelo postal y permite que la empresa tenga un déficit de más de 70.000.000 euros.

200 carteros
La Convergencia Intersindical Galega (CIG) no apoya la protesta al considerar que “es una maniobra de marketing publicitario para sacar rédito sindical en una época de crisis económica”, según aseguró su delegado sindical en Correos, José Ramón Piñeiro.
Sin embargo este sindicato, al igual que los convocantes de la protesta, coinciden en denunciar la falta de inversiones y que cada vez hay menos carteros y personal de oficina. “Lo que aumentan son los jefes. En Bande, hay seis personas y tienen dos jefes”, lamenta José Ramón Piñeiro.

Desde Correos aseguran que su plantilla en Galicia, y por extensión en Ourense, se mantiene estable, pese a la reducción de un 10% en el tráfico postal. En Ourense hay 200 carteros rurales y otros tantos en zonas urbanas.

Miguel Silverio reparte en Nogueira de Ramuín y, además de tener cada día más pueblos, tiene que llevar las cartas en su propio coche, por lo que le pagan 22 céntimos por kilómetro, “el mismo precio que hace cuatro años. El recorrido no lo hago seguido,tengo que realizar 176 paradas y volver a arrancar el coche”, afirma, recalcando que llevan más de 10 años denunciando la falta de personal. “En los últimos años, todos los carteros que se jubilaron se llevaron la plaza”.

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