La nueva estación intermodal de Ourense vuelve a la línea de salida. El Consejo de Ministros autorizó ayer reiniciar el proceso de licitación, es decir, el concurso público para adjudicar las obras. La licitación invalidada quedó congelada el pasado 27 de julio, después de que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) detectara una subida de precios. Pasados más de dos meses, los 130,2 millones de euros que iba a costar la intermodal se han transformado en 134,8 millones.
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) esgrime este sobrecoste de 4,6 millones para devolver la adjudicación al punto de partida. Una subida motivada por el encarecimiento de algunos materiales, como trasladaron desde Adif cuando se paralizó el concurso apenas dos meses después de su publicación.
La cronología de esta licitación fallida se remonta al pasado 16 de mayo, en plena campaña electoral de las elecciones municipales. El Consejo de Ministros dio luz verde a la inversión. Poco después, se publicaba la licitación, con sus correspondientes avisos en el Boletín Oficial del Estado y el Diario Oficial de la Unión Europea.
Diez candidaturas -24 empresas, la mayoría en UTE- lograron vadear el estrecho plazo de presentación de ofertas. Ya entonces, algunos empresarios pusieron en cuestión el ajustado presupuesto y las características del contrato. El 22 de junio se dejaron de admitir aspirantes. Un mes después, el 21 de julio, Adif iba a abrir las ofertas económicas de cada aspirante para ejecutar el multimillonario proyecto. No ocurrió.
A inicios de julio se aplazó la apertura de ofertas al 2 de agosto. Apenas unos días antes de esta fecha, el 27 de julio, Adif anunció que congelaba este trámite indefinidamente tras detectar las mencionadas alzas de costes. No se supo nada más hasta ayer.
Enésima demora
El incremento -relativamente menor teniendo en cuenta el presupuesto global- supondrá el enésimo retraso en el inicio de las obras, para las que se prevé un plazo de seis años y un mes. Las excavadoras tardarán en dejarse ver por A Ponte: habrá que sacar el contrato a concurso de nuevo, abrir un plazo de presentación de ofertas para que las empresas actualicen sus propuestas (o para que se incorporen otras compañías) y desvelar las ofertas otra vez.
Todo apunta a que los trabajos no comenzarán hasta bien entrado el 2024. En otras palabras, la intermodal no se culminará hasta 2030, como pronto. Lejos queda cuando Norman Foster presentó el primer proyecto en 2011 -descartado-; o cuando Gobierno, Adif, Xunta y Concello firmaron un convenio de colaboración en 2016 con los nuevos planos. El proyecto actual contempla ampliar la estación, construir una pasarela sobre las vías y cubrirlas junto a la avenida de Santiago, creando un parque.
"No es profesional"
Celso Delgado, diputado popular en el Congreso, se mostró “desolado” por la noticia: “No es responsable, serio ni profesional” el desistimiento de Adif ante la cantidad de empresas presentadas, dijo antes de añadir que “Adif no puede desconocer cuáles son los precios de las tareas que saca a licitación”.
El portavoz municipal del BNG, Luís Seara, cree que la nueva licitación aproxima “un proxecto que non responde ás necesidades reais da cidade”. Los nacionalistas reivindican trasladar las mercancías a San Cibrao y trasladar las vías junto a la calle Río Arnoia.
En defensa de la licitación salió la diputada en el Congreso por el PSOE, Marga Martín. “Tápaselle a boca ao PP e ao alcalde de Ourense”, cargó, antes de esgrimir que el Gobierno se compromete “de novo”, como con la llegada de la alta velocidad o la construcción de la variante exterior.
