El edificio cesará su actividad el 1 de agosto e "intensificará esfuerzos" para volver a funcionar
Tras la confirmación por parte del Concello del cierre de la residencia de estudiantes "As Burgas" al término del presente curso académico, el director del recinto, Jorge Rodríguez, rompió su silencio y manifestó la intención del centro de "intensificar aún más nuestros esfuerzos y conversaciones con Concello y junta de compensación para intentar reabrir cuanto antes".
Tal y como confirmó Jorge Rodríguez, la residencia cesará su actividad el 1 de agosto, interrumpiendo 12 años de "intensa actividad prestando alojamiento a la comunidad universitaria". El director lamentó que unos 70 alumnos del centro hubiesen transmitido ya su intención de continuar alojados el curso que viene. "Siempre hemos operado dentro de la ley y no se nos ha permitido regularizar la situación", defendió.
El vicerrector del Campus, Virxilio Rodríguez, también puso fin al hermetismo de la Universidad y defendió la gestión llevada a cabo por la concesionaria, Siresa, desde la firma del contrato en 1999, lamentando el perjuicio que este cierre pueda suponer a los estudiantes que tenían pensado alojarse el próximo curso.
El vicerrector explicó que, dado el carácter indirecto de la gestión de Siresa, ésta "é a responsable do servizo", por lo que la Universidad no puede tomar parte activa en las conversaciones entre Concello, empresa y junta de compensación. Virxilio Rodríguez lamentó que la institución "sempre traballou na hipótese de que o servizo permanecería", razón por la que no prevé ofrecer un recinto alternativo.
