INCIDENTE RACISTA

La directiva del PP de Ourense abre expediente de expulsión al interventor detenido el domingo

Finalmente se decidió, tras analizar varias versiones, no sancionar al segundo militante implicado en los hechos

La Junta Directiva provincial del PP de Ourense, reunida en la tarde de este martes en su sede, ha dado cuenta de la apertura de un expediente de expulsión de militancia para el interventor "que provocó un altercado en una mesa electoral del barrio de As Camelias, durante el transcurso de la jornada electoral", en alusión al hombre que fue detenido por agentes policiales el domingo tras causar un altercado.

La apertura de este expediente ya había sido anunciada en un comunicado enviado el lunes por la tarde por el PP y por el propio presidente del partido, y de la Diputación Provincial, José Manuel Baltar, que este martes había hablado de la posibilidad de un segundo expediente de expulsión "fulminante" para el otro interventor del mismo colegio electoral, por una actuación semejante.

Según Baltar, el partido estaba por la mañana en fase de comprobación de los hechos para determinar si se abría ese segundo expediente, que finalmente no se ha acordado en la Junta Directiva Provincial.

Los hechos, según vecinos del barrio, representantes de Anova y fuentes de la comisaría, comenzaron durante la tarde del domingo, pues ambos interventores, en aparente estado de embriaguez, amenazaron e insultaron a miembros de la mesa electoral y, una vez cerrado el colegio electoral y comenzado el recuento, dificultaron la labor, además de llamar "sudaca" a la presidenta de una de las mesas.

El representante de Anova en la mesa electoral llamó a la comisaría de la Policía Nacional, donde le dijeron que ya se habían desplazado varias unidades al lugar, pues había más llamadas en el mismo sentido. Al llegar a la sede vecinal Arranxar, donde se instaló el colegio electoral, uno de los interventores del PP permaneció tranquilo pero el otro se negó a facilitar la identificación a los agentes.

Finalmente, salió esposado, pasó la noche en el calabozo de la comisaría y quedó en libertad tras declarar en el juzgado de guardia, pendiente de la investigación por la denuncia policial de atentado contra la autoridad, injurias y posible delito electoral.

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