Cerca de un centenar de ourensanos decidió disfrutar de una mañana de domingo diferente, saludable y divertida, participando en la prueba Ourense +Orientación, organizada por el grupo La Región.
Es algo muy divertido. Nos lo hemos pasado genial. Que se anime la gente a hacer deporte". Esas fueron las frases más escuchadas en la mañana de ayer, en el Parque Miño, por el centenar de participantes en la prueba de orientación, organizada por La Región dentro de su programa de actividades lúdico-deportivas, Ourense +Deporte.
La mayoría de los ourensanos que decidieron aceptar este pequeño reto optaron por el recorrido más profesional, sólo quince de los inscritos prefirieron la opción de iniciación. Desde las 10,30 horas de la mañana y en lapsos de tiempo de aproximadamente cinco minutos -quince entre grupo y grupo, el de iniciación o el más profesional-, los participantes, en solitario o en pareja, con sus mapas en la mano, iniciaban la ruta de la orientación.
Una de las premisas que tuvieron en cuenta los participantes, tal y como les indicaron los organizadores, es no "seguir al que va por delante, porque se puede equivocar, cometer un error a la hora de leer el mapa, y entonces tú también lo cometes. Aquí lo importante es concentrarte en el mapa y confiar en tí mismo y en tu capacidad para leer las pistas y hacer el camino".
Para unos, localizar las balizas ya fue un tarea lo suficientemente compleja, por lo que decidieron tomarse con mucha calma la finalización del recorrido e ir a un ritmo lento, de paseo; otros, en cambio, corrieron con mucha fuerza para conseguir ser los más rápidos y situarse en los primeros puestos, una cuestión de pundonor.
A su llegada a meta, tras una media de 50 minutos en finalizar el trayecto, el ritual entre los participantes se repetía: entregar la ficha con las correspondientes marcas efectuadas por las pinzas, que se encontraban en las balizas del recorrido; coger un agua y la mochila de avituallamiento, para reponer fuerzas, y echar un vistazo al ordenador en el que se podía ir siguiendo la clasificación. Después de eso, muchos de los participantes decidieron continuar la mañana en el parque, disfrutando del espléndido día de sol, y a la espera de que llegase el final de la mañana, con el sorteo de regalos.
Mientras, los más pequeños comenzaban a impacientarse por el inicio de su prueba, que tuvo lugar sin salir del Parque Miño, y que comenzó, tal y como estaba prevista, a las 12.00. "Mamá, tú, ¿en qué número me apuntaste?", preguntaba ya algo nervioso un niño con su camiseta del Barça, mientras iban llamando a algunos compañeros para comenzar la prueba, y él aún se mantenía en espera.
El organizador técnico de la prueba, Oscar Gómez, aseguró que la convocatoria había sido un éxito."Vino mucha gente y todo ha salido muy bien, además la gente se marcha contenta y con ganas de repetir", valoró.
Para finalizar la mañana deportiva y saludable, hubo sorteo de premios y el deseo de los participantes de que se organice una segunda jornada de orientación, ya que ésta "ha estado genial, no ha sido excesivamente dura y eso hace que los que somos novatos queramos repetir", aseguraban los participantes.
