El fuego, por segunda vez en lo que va de agosto, regresó a la Ribeira Sacra, esta vez en el municipio de Nogueira de Ramuín, en unas fechas en las que la afluencia de turistas es la mayor del año. De hecho, según reconocían ayer en el Parador de Santo Estevo, la ocupación para el puente de la Asunción es del 100%.
Las llamas continuaban anoche cerca del núcleo de Pombar, en la parroquia de Santo Estevo de Ribas de Sil, después de iniciarse a las 18,29 horas y a unos 400 metros de la casas. De hecho, desde el emblemático parador, a sólo cinco kilómetros, eran visibles el humo y los aviones que sobrevolaban la zona, afanándose en controlar un importante frente. Medio Rural movilizó a diez aeronaves (siete helicópteros y tres aviones), además de un importante contingente terrestre: 11 brigadas, tres motobombas, un agente y dos palas.
En esta ocasión, el incendio no es imputable a una acción intencionada sino al desprendimiento del cable de una línea de alta tensión de Fenosa, que provocó cuatro focos diferentes, según confirmó ayer el teniente alcalde del municipio, Camilo Rodríguez. Los vecinos apuntaban que la última vez que la eléctrica desbrozó bajo la línea fue hace tres años. Esta incidencia dejó además a dos pequeños pueblos sin suministro eléctrico.
Precisamente, una chispa en una línea de alta tensión emplazada en Quiroga (Lugo) es la causa que se baraja como la causante del fuego que obligó a la Xunta a decretar la alerta 1 el domingo en Seadur (Larouco). Medio Rural dio este fuego por extinguido ayer rebajando las previsiones de monte ardido a 400 hectáreas en vez de las 500 iniciales.
También ayer se produjeron otros incendios forestales en Riós (Fumaces), que calcinó 0,8 hectáras de monte raso y en Toén (Puga). Mientras que el primero fuer extinguido por la mañana, el segundo estaba activo aún por la noche ya que comenzó pasadas las siete de la tarde. Medio Rural movilizó cuatro agentes, nueve brigadas, cinco motobombas, cinco aviones y cuatro helicópteros. La cortina de humo era visibles desde la ciudad.
En esta ocasión, el incendio no es imputable a una acción intencionada sino al desprendimiento del cable de una línea de alta tensión de Fenosa, que provocó cuatro focos diferentes, según confirmó ayer el teniente alcalde del municipio, Camilo Rodríguez. Los vecinos apuntaban que la última vez que la eléctrica desbrozó bajo la línea fue hace tres años. Esta incidencia dejó además a dos pequeños pueblos sin suministro eléctrico.
Precisamente, una chispa en una línea de alta tensión emplazada en Quiroga (Lugo) es la causa que se baraja como la causante del fuego que obligó a la Xunta a decretar la alerta 1 el domingo en Seadur (Larouco). Medio Rural dio este fuego por extinguido ayer rebajando las previsiones de monte ardido a 400 hectáreas en vez de las 500 iniciales.
También ayer se produjeron otros incendios forestales en Riós (Fumaces), que calcinó 0,8 hectáras de monte raso y en Toén (Puga). Mientras que el primero fuer extinguido por la mañana, el segundo estaba activo aún por la noche ya que comenzó pasadas las siete de la tarde. Medio Rural movilizó cuatro agentes, nueve brigadas, cinco motobombas, cinco aviones y cuatro helicópteros. La cortina de humo era visibles desde la ciudad.
