Los incendios forestales no cesan en los montes de la provincia pese a ser invierno, disparados por la falta de lluvia. Los efectivos de extinción sofocaron cinco fuegos ayer en Xinzo, Arnoia, Monterrei, A Mezquita y Calvos de Randín. Los dos últimos fueron los más virulentos pues, según dio a conocer la Consellería de Medio Rural, calcinaron 55 hectárea de monte raso y arbolado.
En el caso de A Mezquita, las llamas se declararon poco antes de las 23.00 horas del viernes en los alrededores de la localidad de Chaguazoso y no quedaron extinguidas hasta las tres de la madrugada, después de afectar a fincas de castaños. Este es el segundo incendio que se declara en la zona en menos de dos días, quemando castaños de gran valor ecológico, según el alcalde, Rafael Pérez.
En Calvos de Randín, el fuego se inició a las nueve de la mañana de ayer, afectando a 30 hectáreas de monte, 10 de ellas de superficie arbolada, según dio a conocer Medio Rural. Las llamas, que no quedaron extinguidas hasta primera hora de la tarde, quemaron parte del tendido telefónico, dejando a los vecinos de Randín sin servicio. En ambos incendios trabajaron cinco brigadas y tres coches motobombas.
Los efectivos antiincendios también acudían a primera hora de la tarde a sofocar un fuego que se declaró en el límite de los municipios de Cualedro y Monterrei con Portugal, quemando monte raso y arbolado. En la misma zona, se registraron otros dos conatos de incendio en los últimos días, según fuentes de la Guardia Civil.
Pasadas las 16.00 horas, una brigada forestal, apoyada por un coche motobomba, sofocaba otro incendio en plena laguna de Antela, en Sandiás. Las llamas se declararon en la maleza que separaba dos parcelas, propagándose a una masa arbolada.
Prácticamente a la misma hora, otro fuego calcinaba viñedos en Arnoia. En este caso, las llamas también se declararon en un matorral y se propagaron con rapidez por la viña. 'Cuando llegamos no había nadie en el lugar. El fuego comenzó en un matorral', explicó el alcalde, José Camilo Fariñas.
VIGILANCIA
La prolongada sequía mantiene en alerta a los efectivos de extinción y fuerzas de seguridad para evitar los incendios. Desde el pasado sábado, medio millar de guardias civiles patrullan el monte para prevenir los fuegos y detener a los incendiarios. El instituto armado adelantó la campaña de vigilancia antiincendios dada la situación climatológica.
En Calvos de Randín, el fuego se inició a las nueve de la mañana de ayer, afectando a 30 hectáreas de monte, 10 de ellas de superficie arbolada, según dio a conocer Medio Rural. Las llamas, que no quedaron extinguidas hasta primera hora de la tarde, quemaron parte del tendido telefónico, dejando a los vecinos de Randín sin servicio. En ambos incendios trabajaron cinco brigadas y tres coches motobombas.
Los efectivos antiincendios también acudían a primera hora de la tarde a sofocar un fuego que se declaró en el límite de los municipios de Cualedro y Monterrei con Portugal, quemando monte raso y arbolado. En la misma zona, se registraron otros dos conatos de incendio en los últimos días, según fuentes de la Guardia Civil.
Pasadas las 16.00 horas, una brigada forestal, apoyada por un coche motobomba, sofocaba otro incendio en plena laguna de Antela, en Sandiás. Las llamas se declararon en la maleza que separaba dos parcelas, propagándose a una masa arbolada.
Prácticamente a la misma hora, otro fuego calcinaba viñedos en Arnoia. En este caso, las llamas también se declararon en un matorral y se propagaron con rapidez por la viña. 'Cuando llegamos no había nadie en el lugar. El fuego comenzó en un matorral', explicó el alcalde, José Camilo Fariñas.
VIGILANCIA
La prolongada sequía mantiene en alerta a los efectivos de extinción y fuerzas de seguridad para evitar los incendios. Desde el pasado sábado, medio millar de guardias civiles patrullan el monte para prevenir los fuegos y detener a los incendiarios. El instituto armado adelantó la campaña de vigilancia antiincendios dada la situación climatológica.
