Empresarios de salas de fiesta contrataron sus servicios para poner coto a los 250 cotillones que, según ellos, se celebrarán

Los hosteleros vigilarán las fiestas ilegales de fin de año con detectives

Vecinos de Ourense ataviados con ropa de fiesta durante la Nochevieja de 2010. (Foto: MIGUEL ÁNGEL)
Las discotecas y salas de fiesta podrían dejar de ingresar en Ourense 750.000 euros durante la noche de Fin de Año a consecuencia de los 250 festejos ilegales previstos en la provincia esa madrugada para dar la bienvenida al 2012. Esa es, al menos, la previsión con la que trabaja Fesdiga, una federación de empresarios de este sector -con medio centenar de asociados en Ourense- que reclama más control por parte de la Administración para, además de evitar la competencia desleal, poner fin 'al grave peligro que suponen estas fiestas'.
Precisamente, Samuel Pousada, su presidente, indica que ya han tomado cartas en el asunto y que, 'ante la falta de colaboración de los ayuntamientos', este año optaron por contratar una empresa de detectives privados en cada provincia. Las directrices que les dieron, asegura, son claras: 'Investigar las fiestas clandestinas y comprar todas las entradas de eventos que no cumplan la normativa para presentarlas ante la Agencia Tributaria'. Según Pousada, con esta actuación, se pretende acreditar ante el erario 'el fraude fiscal que estas celebraciones suponen y utilizarlas como medio de prueba en posteriores denuncias'.


FIESTAS ILEGALES EN LA CIUDAD

La Federación de Empresarios de Salas de Fiesta, Bailes y Discotecas de Galicia estima que sólo la ciudad dará cobijo en Nochevieja a entre 40 y 60 festejos y que, el resto, tendrán lugar en la provincia, fundamentalmente en ayuntamientos de tamaño medio como O Carballiño, Verín o Xinzo de Limia. Del total de fiestas que se prevé que no se ajusten a la normativa vigente en Ourense, ocasionando el citado perjuicio económico, según Fesdiga, 'el 15% se desarrollará de forma clandestina en garajes o recintos sin licencia'. Completan este porcentaje, los que incurrirán en ilegalidades por extralimitarse los locales en su horario o por desarrollar en Nochevieja una actividad distinta a la que contempla su licencia.

Al daño económico que causan los recintos que acogen fiestas sin la preceptiva licencia o que, en caso de tenerla, la incumplen, se suma la carencia de medidas de seguridad detectada en los locales que albergan festejos ilegales. Tal y como sostiene Samuel Pousada, muchos de ellos, dan cobijo a celebraciones sin el seguro pertinente, constituyendo una 'bomba de relojería'. Por ello, esta entidad contactó a lo largo de los últimos meses con los ayuntamientos gallegos solicitando la puesta en marcha de un Plan de Seguridad Navideño que incluyese inspecciones y más apoyo policial, petición que, en la mayoría de los casos, 'no se llegó a materializar'. Debido a ello, esta organización decidió recurrir a detectives que trabajarán de forma ininterrumpida durante la Navidad con el fin de investigar todo tipo de cartelería sospechosa y atajar los festejos clandestinos.

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