La Xunta inmovilizó una partida de 5.000 conejos sacrificados en Celanova sin inspección sanitaria

La huelga de veterinarios paraliza el trabajo en los mataderos y frena la producción de Coren

Las instalaciones del matadero de conejos de Galicarn, en el polígono industrial de Celanova. (Foto: Miguel Ángel)
La primera jornada de la huelga de veterinarios de la Xunta en demanda de estabilidad laboral se saldó con la inmovilización de 5.000 conejos en el matadero de Galicarn en Celanova, ya que sacrificó sin control sanitario. En Coren, pararon las tres plantas.
Veterinarios de la Xunta iniciaron una huelga de dos días para denunciar la ‘precariedad’ laboral a la que aseguran esta sometido este colectivo que integran más de 600 profesionales en Galicia (120 en Ourense). Los sindicatos convocantes (CC.OO., CIG, CSIF y UGT) cifraron en ‘próximo’ al 100% el seguimiento de esta huelga, sin contar los servicios mínimos de los que disponen todas las zonas para garantizar la seguridad de salubridad y alimentaria (tres en la provincia). La huelga ha provocado el cierre de prácticamente la totalidad de los mataderos de la provincia, así como la paralización de la actividad del Grupo Coren, que se ha visto obligado a cerrar sus tres plantas y dejar sin trabajo a 2.000 empleados. A pesar de que la jornada se desarrollo prácticamente sin incidencias, en Ourense la Delegación de Sanidade inmovilizó en Celanova una partida de 5.000 conejos en las instalaciones que la empresa Galicarn posee en el parque empresarial. Los animales, ya sacrificados, se disponían a entrar en la cadena de alimentación cuando el jefe de zona se personó en el lugar para entregar una resolución de inmovilización cautelar de la mercancía, tras recibir un acta del Seprona, que certificaba que el matadero estaba realizando el sacrificio de animales sin inspección sanitaria. ‘Las empresas saben que no se puede sacrificar un animal sin la presencia de un veterinario que realice los controles ante y post mortem que garanticen la calidad del producto para su consumo. Galicarn asumió el riesgo de hacerlo’, señalaba el delegado Juan José Monedero, a la vez que anunció que ‘la primera decisión será la destrucción de la mercancía. Pero analizaremos con los servicios jurídicos la actitud de la empresa’.

Desde Galicarn, el coordinador Marcos Cid, destacaba que, pese a ser ‘conscientes de que tenemos que tener un veterinario que supervise el proceso, queremos trabajar y no podemos parar toda nuestra producción cada vez que hay una huelga’. La empresa realizará una reclamación patrimonial a la Administración.

Mataderos y carnicerías hablan de ‘impotencia’ y ‘descontrol’

La mayor parte de los mataderos de la provincia se han visto obligados a paralizar la producción en sus naves, aunque sus gerentes coinciden en que no habrá problemas de abastecimiento a los mercados porque disponen de mercancía suficiente en las cámaras. Más que de pérdidas económicas, responsables de mataderos y carnicerías hablan de ‘descontrol’ en el trabajo diario y confían poder regresar a la normalidad el jueves. A pesar de las reservas, Emilio González, gerente del Matadero de Ourense, apunta que ‘nos sentimos impotentes y afectados por una situación en la que no podemos interferir para poder solucionar el problema, al tratarse de una cuestión que afecta únicamente a la funcionarios y la Xunta’. Palabras secundadas por el director adjunto del Grupo Coren, Emilio Rial, quien recordaba que ya ‘venimos de una huelga del transporte’. Añade que como ‘este paro sólo afecta a Galicia, la competencia del resto de empresas del mercado español se encargaran de atender la demanda de nuestros clientes’. En Verín uno de los veterinarios optó por no secundar la huelga, por lo que la actividad se desarrolló con cierta normalidad.




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