La actividad incendiaria que azota sin tregua los montes de Ourense desde la pasada semana sigue devastando hectáreas forestales, tras calcinar ya 1.114 hectáreas en la provincia, según los datos facilitados por Medio Rural. No en vano, un incendio declarado ayer en el parque natural de A Serra da Enciña da Lastra (Rubiá) alrededor de las doce y media de la mañana calcinó cuatro hectáreas de monte raso y media de arbolado en esta reserva medioambiental.
Tres aviones y un helicóptero, así como distintos medios y efectivos terrestres, trabajaron en la zona en la que se registró el fuego, a dos kilómetros de la localidad de O Real (Rubiá), hasta poco después de las 17 horas, momento en el que quedó extinguido, según aseguraron fuentes de Medio Rural de la Xunta.
Este no fue el único incendio que afectó ayer a los montes de Ourense. Durante la jornada, los efectivos antincendios trabajaron en hasta siete fuegos más. Consiguieron extinguir los incendios que afectaron a Oseira (San Cristovo de Cea), Abades (Baltar), Infesta (Monterrei), Vilardá (San Xoán de Río), Grou (Lobios) y Sobradelo (Xunqueira de Ambía), tras quemar 25, 78, 20, 85, 75 y 200 hectáreas de monte, respectivamente. Asimismo, los medios de lucha contra los incendios también sofocaron ayer a las 13,33 horas el fuego forestal que llevaba activo desde el miércoles a las 21 horas en Vilar (Chandrexa de Queixa), después de que arrasase 16,8 hectáreas.
OPERATIVO ESPECIAL EN LAZA
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente activó un plan extraordinario de refuerzo en la extinción de incendios forestales ante la situación de sequía, que supone la incorporación de brigadas de labores preventivas a la base de Laza (además de a otras ubicadas en León, Cáceres y Ávila). Este departamento sostiene que 'se mantendrá mientras la situación meteorológica no cambie'. Precisamente, la acuciante sequía que merma los recursos hídricos del suelo, así como las temperaturas primaverales que se registran a estas alturas del año , llevan ya a los efectivos antincendios de la Xunta a vaticinar que la campaña estival será 'desastrosa', teniendo en cuenta las hectáreas que ardieron en Ourense la última semana. Gran parte de esta actividad incendiaria, anómala en meses como febrero o marzo, según indica Juan Pérez, responsable de Medio Rural de CC.OO., se debe 'a queimas que se descontrolan, ben estean autorizadas ou non'. Por ello, critica que Medio Rural, 'tendo en conta a meteoroloxía adversa que temos, non as vetase aínda', una petición que hicieron pública ayer también miembros de Amigos da Terra. Asimismo, Juan Pérez expresa que todos los indicios apuntan a que el verano será duro, dado que 'as plantillas están en cadro, non hai política de prevención, non se cubren vacantes nos operativos, e, sobre todo, a que previsiblemente non choverá'. Desde la Xunta, con todo, indican que valoran 'prohibir as queimas se segue a seca' y que 'as vacantes se cubren con normalidade'.
Mientras, la Guardia Civil imputó a F.L.C., de 61 años, y S.G.V, de 46, un delito de incendio por sendas quemas que arrasaron 11,30 y 70 hectáreas en O Barco y Vilariño de Conso y detuvo a M.V.V., de 72, por un fuego en Maus (Muíños).
OURENSE CON 22,9 GRADOS, DIO LA MÁXIMA DE ESPAÑA
La sequía que afecta a la provincia, favorecida por las altas temperaturas que se registran estos días y que contribuye a la actividad incendiaria, podría continuar, si las previsiones meteorológicas no cambian de tendencia. Durante la jornada de ayer, Ourense alcanzó la máxima de la Península, al llegar a los 22,9 grados de máxima a las 18,20 horas, según los datos facilitados desde la estación de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la ciudad. Le siguió, de cerca, la máxima que se registró en otro punto de la provincia, en O Carballiño. Allí, la Aemet anotó una temperatura máxima de 22,8 grados, registro superado sólo por la capital ourensana y por la ciudad de Girona (en donde se registraron 22,8 grados a las 14,10 horas). Más lejos en el ránking nacional de las temperaturas máximas de la Península se situaron ayer otras ciudades, como la de Málaga, en donde se alcanzaron los 22,4 grados, o Martinet (Lleida), que superó los 22,1 grados a las 15,10 horas.
Este no fue el único incendio que afectó ayer a los montes de Ourense. Durante la jornada, los efectivos antincendios trabajaron en hasta siete fuegos más. Consiguieron extinguir los incendios que afectaron a Oseira (San Cristovo de Cea), Abades (Baltar), Infesta (Monterrei), Vilardá (San Xoán de Río), Grou (Lobios) y Sobradelo (Xunqueira de Ambía), tras quemar 25, 78, 20, 85, 75 y 200 hectáreas de monte, respectivamente. Asimismo, los medios de lucha contra los incendios también sofocaron ayer a las 13,33 horas el fuego forestal que llevaba activo desde el miércoles a las 21 horas en Vilar (Chandrexa de Queixa), después de que arrasase 16,8 hectáreas.
OPERATIVO ESPECIAL EN LAZA
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente activó un plan extraordinario de refuerzo en la extinción de incendios forestales ante la situación de sequía, que supone la incorporación de brigadas de labores preventivas a la base de Laza (además de a otras ubicadas en León, Cáceres y Ávila). Este departamento sostiene que 'se mantendrá mientras la situación meteorológica no cambie'. Precisamente, la acuciante sequía que merma los recursos hídricos del suelo, así como las temperaturas primaverales que se registran a estas alturas del año , llevan ya a los efectivos antincendios de la Xunta a vaticinar que la campaña estival será 'desastrosa', teniendo en cuenta las hectáreas que ardieron en Ourense la última semana. Gran parte de esta actividad incendiaria, anómala en meses como febrero o marzo, según indica Juan Pérez, responsable de Medio Rural de CC.OO., se debe 'a queimas que se descontrolan, ben estean autorizadas ou non'. Por ello, critica que Medio Rural, 'tendo en conta a meteoroloxía adversa que temos, non as vetase aínda', una petición que hicieron pública ayer también miembros de Amigos da Terra. Asimismo, Juan Pérez expresa que todos los indicios apuntan a que el verano será duro, dado que 'as plantillas están en cadro, non hai política de prevención, non se cubren vacantes nos operativos, e, sobre todo, a que previsiblemente non choverá'. Desde la Xunta, con todo, indican que valoran 'prohibir as queimas se segue a seca' y que 'as vacantes se cubren con normalidade'.
Mientras, la Guardia Civil imputó a F.L.C., de 61 años, y S.G.V, de 46, un delito de incendio por sendas quemas que arrasaron 11,30 y 70 hectáreas en O Barco y Vilariño de Conso y detuvo a M.V.V., de 72, por un fuego en Maus (Muíños).
OURENSE CON 22,9 GRADOS, DIO LA MÁXIMA DE ESPAÑA
La sequía que afecta a la provincia, favorecida por las altas temperaturas que se registran estos días y que contribuye a la actividad incendiaria, podría continuar, si las previsiones meteorológicas no cambian de tendencia. Durante la jornada de ayer, Ourense alcanzó la máxima de la Península, al llegar a los 22,9 grados de máxima a las 18,20 horas, según los datos facilitados desde la estación de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la ciudad. Le siguió, de cerca, la máxima que se registró en otro punto de la provincia, en O Carballiño. Allí, la Aemet anotó una temperatura máxima de 22,8 grados, registro superado sólo por la capital ourensana y por la ciudad de Girona (en donde se registraron 22,8 grados a las 14,10 horas). Más lejos en el ránking nacional de las temperaturas máximas de la Península se situaron ayer otras ciudades, como la de Málaga, en donde se alcanzaron los 22,4 grados, o Martinet (Lleida), que superó los 22,1 grados a las 15,10 horas.
