Una misa con procesión y la tradicional quema en el Parque festejaron al santo en la ciudad

Madamitas y rosquillas para San Lázaro

Las madamitas, preparadas para ser quemadas. Detrás, el público asistente. (Foto: XESÚS FARIÑAS)
Misa, procesión, mucha rosquilla, banda de música, cabezudos y tradicional quema de madamitas, todo ello en una jornada plenamente primaveral de buen tiempo y fresca brisa, lejos del calor bochornoso de mediados de semana. Así celebraron los ourensanos la fiesta de San Lázaro, entre pólvora, ruido de tracas y mucho, mucho dulce.
La celebración, que se consumó por la mañana, comenzó pasadas las 11 con la misa en la iglesia de Santo Domingo, a la que asistieron representantes socialistas y populares de la Corporación local, encabezados por el alcalde, Francisco Rodríguez. Después comenzaba la tradicional procesión, con decenas de personas siguiendo al santo hasta la iglesia de San Francisco, un ritual que continuó después delante de la Subdelegación del Gobierno. Ahora tocaba la quema de madamitas, en un espacio acotado por vallas para garantizar la seguridad de todos los asistentes, que eran muchos. Cuatro figuras llenas de pólvora y tracas estallaron por los aires, entre aplausos y satisfacción de los asistentes, que remataron la soleada mañana acudiendo a los puestos de venta de rosquillas y dulces, para degustar antes de la comida o llevarlos a casa a modo de postre típico de la ocasión.

Te puede interesar