Julio Ancochea, jefe del servicio de Neumología en el Hospital Universitario de La Princesa (Madrid)
Del corazón de la Terra de Trives procede uno de los facultativos de mayor renombre de la sanidad española. Julio Ancochea, neumólogo nacido en A Pobra que ejerce en el Hospital de La Princesa de Madrid, fue recientemente reconocido como el más prestigioso de España dentro de su especialidad, según un ránking en el que participaron profesionales y expertos en el sector de la salud. Una recompensa a un emigrante que siempre ha tenido en cuenta sus raíces.
¿En qué consiste este ránking de facultativos?
Forma parte de lo que se ha llamado "I Monitor de Reputación Sanitaria" (MRS), un estudio que clasifica a los mejores hospitales, servicios hospitalarios y profesionales médicos en 14 especialidades. Este informe está basado en la realización de entrevistas a 2.400 médicos, enfermeros, pacientes y periodistas especializados. En el caso concreto de las especialidades médicas, se hizo una pregunta abierta: "Señale los que a su juicio son los médicos con mejor reputación de España en las 14 especialidades". Cada un de esto expertos señaló a dos y con estos datos se elaboró un ránking para cada una de ellas, y a los de Ourense nos cabe la satisfacción de que en Neumología, el elegido como más prestigioso es de Trives.
¿Cómo recibió la noticia?
Supuso una satisfacción para mí, para mi familia y para mi pueblo, y también para la sanidad gallega y mi servicio en el Hospital La Princesa. Este tipo de noticias suele tener una trascendencia hiperbólica exagerada. Yo estaba en una exposición de una tesis doctoral, así que casi fui el último en enterarme; de repente, comencé a recibir decenas de llamadas, mensajes y correos electrónicos de todas partes, y yo no sabía de que estaban hablando.
¿Qué representó para usted este reconocimiento?
Para mí es una satisfacción, y a mí me gusta ligarlo a mi pueblo, a Trives y a la medicina gallega. Hace unos días tuve el honor de participar en la entrega de los "Premios á Sanidade de Galicia", en Santiago, donde compartí con José María Fernández Sousa-Faro el premio a la "Personalidade sanitaria galega", y unos días después, a un gallego se le reconoce como una persona de prestigio en su especialidad a nivel nacional. Pero en el fondo, la satisfacción personal es que este reconocimiento refleja que mis compañeros me aprecian y me quieren, y que los enfermos valoran tu esfuerzo profesional.
Influyen, y mucho, sus raíces gallegas en su éxito.
Por supuesto, por eso también quiero compartir este reconocimiento con la Asociación de Médicos Gallegos (Asomega). Hace unos días, homenajeamos desde la asociación a otro compañero que se acaba de jubilar, el doctor Sueiro. Con él comenté que los médicos gallegos que trabajamos fuera de Galicia compartimos muchas cosas, como proyectos, ilusiones, inquietudes o la pasión por la palabra, es decir, queremos estar a la altura de nuestras palabras, porque pensamos que hacer es la mejor manera de decir. También compartimos la pasión por la Medicina, porque aparte de entenderla en su concepción tradicional de ciencia y arte, también queremos apostar por una Medicina más humanista, recuperar sus valores. Y lo más importante es que compartimos un sentimiento, el amor por Galicia y nuestros orígenes, en mi caso Trives, mi pueblo, mi cuna, mi familia.
¿Cómo se percibe su origen ourensano en el ejercicio de su profesión?
Me gusta mucho el concepto de la ourensanía, es algo que yo profeso. Por muchos años que lleve lejos, uno siempre es de Ourense y de Trives, y hay que reivindicar que es una tierra única desde el punto de vista artístico y cultural, así como el de su gente. Yo he tenido la suerte de dar conferencias por todo el mundo, yo diría que más de mil en cuatro de los cinco continentes, pero la más emocionante que viví en mi vida, la viví en Trives, en plenas fiestas de San Bartolomé, hablando de la dimensión humana de la Medicina, ni siquiera hablaba de mi especialidad. Si yo tuviese que recordar una conferencia, no serían las de San Diego, San Francisco o Buenos Aires, sería la de las fiestas de Trives.
¿Cuál es la clave para ser un buen neumólogo?
La Medicina es ciencia, arte y algo más, y ese "algo más" es para mí el sentimiento. Yo creo que un médico es una persona que trabaja para otras personas, con lo que la clave es la relación médico-paciente. La Medicina evoluciona mucho, cada día surgen nuevos conceptos que la hacen más eficaz, pero nada podrá sustituir a esta relación, que se basa en la confianza; el paciente tiene que creer en ti. Para mí, la confianza mueve el mundo, es la base de las relaciones humanas e incluso la base de la democracia. La relación médico-paciente ya no es la de hace unos años, que era muy vertical: el médico recetaba y sentenciaba; hoy en día es mucho más democrática, de tú a tú. Es a lo que yo llamo relación de "alianza terapéutica". A esto se le suma que la confianza puede ser contagiosa, y cuando tus compañeros de profesión confían en ti es cuando tienes el privilegio de recibir un reconocimiento como este. Quizás todo esto se sustente en algo que mi padre, que fue fiscal de Trives, Viana do Bolo y O Barco durante cerca de cuarenta años, me dijo: "Lo que quiero que seas en la vida es una buena persona". A veces, tus compañeros te votan no por ser intelectualmente el líder en cuanto a investigación de vanguardia, sino que te votan porque te consideran una persona cercana, te quieren.
