Durante la sesión, el PP sacó "tarjeta roja" para que los socialistas "se vayan al banquillo", el BNG pidió explicaciones y DO votó en contra
El gobierno local del Ayuntamiento de Ourense, donde gobierna en minoría el PSOE, ha logrado el respaldo de casi toda la oposición para impulsar la construcción de un nuevo centro de salud, porque es "necesario" además de una petición vecinal desde hace diez años. Sin embargo, los portavoces le advirtieron al ejecutivo presidido por Agustín Fernández de que no era un respaldo a su gestión.
El pleno con carácter extraordinario y urgente fue convocado dos días antes, con un único punto previsto para subsanar un error en la tramitación, comenzada años antes de ser anulado el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) por sentencias firmes del Tribunal Supremo, en 2011.
El problema para tramitar la cesión de un terreno a la Xunta de Galicia para la construcción del centro de salud está relacionado con las plazas de aparcamiento previstas para ese equipamiento, recogidas en un decreto autonómico de septiembre de 2011.
En la tramitación iniciada se hizo constar que la previsión de plazas públicas de aparcamiento tendría que ser algo más de 400 según el PGOM anulado y según la ordenación provisional que se hizo para mantener la obra, tras la caída del plan urbanístico.
En el espacio previsto, según fuentes consultadas por Europa Press, no es posible disponer de esas plazas por lo que ningún técnico municipal informó favorablemente. En el pleno convocado para este miércoles se votó para aprobar la modificación de ese detalle, con el fin de hacer valer la Ley urbanística de ámbito autonómico en la que la provisión de aparcamiento se reduce a 50 plazas.
DO ALBERGA DUDAS
Durante el pleno, la portavoz de Democracia Ourensana, Susana Gómez, dijo que no respaldaban esa modificación al albergar muchas dudas "no sobre la tramitación, sino por la falta de credibilidad de la edila Áurea Soto, a la que acusa de "mentir más que habla".
Relató que a los grupos municipales sólo se le entregó una providencia de la edila y un informe jurídico, "pero ningún informe técnico que avale esta modificación, ni del Ayuntamiento ni de los otros, los pagados, así que no está claro lo que quieren hacer ahí ni lo explican".
"CHANCHULLO DE XUNTA Y PSOE"
Según Gómez, los vecinos del barrio de O Couto tienen que saber que hay que "luchar por la ley" y que DO "no dice no al centro de salud", sino al "chanchullo entre la Xunta y el PSOE para hacer esta obra sin que se entienda por qué es tan urgente hacer esto hoy".
Gómez dijo no fiarse de Soto pues habla de subsanar errores. "Pero están ahí hace años y no sabemos por qué hay que apoyar esto para la edila y para la Xunta", ha apostillado.
Por su parte, la portavoz del PP Mónica Mourelo, centró su intervención recordar que fue el PP el que "dio la voz de alarma" al preguntar por la licencia para ese centro de salud. "No obtuvimos respuesta, como siempre, y se nos remitió a la junta de área que, como siempre, no fue convocada desde hace meses, así que esto de hoy deriva de la falta de transparencia y de gestión de este Gobierno en minoría", ha considerado.
POR LOS VECINOS
El PP anunció desde la primera intervención su voto favorable a la modificación, pero no como respaldo a la gestión urbanística municipal "sino porque ese equipamiento fue pedido por los vecinos y una vez más, el PP está con los vecinos".
Con todo, reprochó al PSOE que se "le llene la boca" cuando critican a la Xunta por no invertir en Ourense, y ese centro de salud, según Mourelo, supondrá una inversión superior a los 3 millones de euros.
Luego, el portavoz municipal del PP, Rosendo Fernández, colocó una carpeta de color rojo sobre la mesa y dijo que era "una tarjeta roja para que se vayan al banquillo", y anunció que si el equipo de gobierno no se va "por su propio pie, se encargará de hacerlo la Justicia".
Fernández dijo que, una vez más, "el que gobierna de facto en Ourense es el PP y saca las castañas del fuego a este gobierno ineficiente ante un proyecto estratégico como éste", al tiempo que sugirió que el aparcamiento contemplado en la Ley urbanística se haga en los terrenos "donde Áurea Soto quería poner un tanatorio, en contra de la opinión de los vecinos".
También el BNG dio su voto favorable a la modificación necesaria para desbloquear la construcción sanitaria. El portavoz, Xosé Somoza, dijo coincidir con DO en la demanda de información sobre un proyecto que fue "arma arrojadiza entre PP y PSOE" y que ahora, "podría acabar en el juzgado". "Votaremos a favor porque los vecinos quieren este centro de salud y lo haremos", remató.
Sobre la información pedida por DO y BNG, Somoza respondió a Susana Gómez que la edila socialista Áurea Soto "ya no tiene tiempo de responder", en alusión a su situación judicial -imputada pendiente de fecha para juicio por la plaza de San Antón- "pero el PP igual sí tiene tiempo", en alusión a la próxima Corporación municipal.
ABRIR EL NEGOCIO
Minutos antes de la votación, el alcalde Agustín Fernández tomó la palabra y en ese momento, el portavoz de DO Gonzaló Pérez Jácome, se levantó para irse, mientras explicaba que lo hacía para abrir su negocio, y añadía: "Mucho más porque habla el alcalde".
Agradeció la colaboración de la Xunta, la ayuda de toda la Corporación para que haya celeridad en ese tema y se dirigió a Rosendo Fernández, para decirle que antes de que el PP sacase el tema en el pleno municipal de octubre él (el alcalde) ya había hablado con el vicepresidente Alfonso Rueda y con la responsable sanitaria provincial Eloína Núñez, a los que agradeció también que todo se haga "con prontitud".
Aludió a la inversión y reprochó al PP que hable de ella "porque se hará con fondos europeos". Los votos fueron 23 a favor, ninguno en contra y una abstención -de DO- con la ausencia de un edil por cada grupo.
