Un inventario catalogará a las empresas de las áreas industriales de San Cibrao y Pereiro según el potencial de contaminación de los posibles vertidos que pudiesen producir, con el fin de conocer mejor las actividades industriales que se desarrollan en el área y poder actuar en caso de alguna incidencia.
Es una de las medidas incluidas en el Plan de Control de Vertidos establecido para las citadas zonas, que entra ya en fase de coordinación con las industrias. En este sentido, el próximo jueves tendrá lugar una sesión informativa a las empresas instaladas en el Parque Tecnológico (prevista para las 12.30 horas en el edificio CEI), después de que se realizase una en San Cibrao. También está prevista otra en Pereiro.
En ese encuentro se informará sobre el plan de visitas a las empresas, que establecerá su clasificación en cuatro categorías según el potencial de contaminación. Así, por una parte, determina las firmas poco susceptibles de producir vertidos contaminantes y, por otra, aquellas que sí los pueden generar, clasificadas según el nivel de toxicidad sea alto, muy alto o extremo.
En la reunión, también se informará a los empresarios de las medidas de control que se están estableciendo entre los Concellos de San Cibrao y Pereiro junto a la Diputación de Ourense, a través de la empresa AquaOurense, para evitar que se produzcan vertidos a los ríos.
El plan establece acciones de control para la detección de vertidos o compuestos tóxicos que se puedan producir, su detección en tiempo real (a través de cuatro puntos de alerta) para poder establecer un plan de intervención en la depuradora de San Cibrao das Viñas y, además, poder determinar cuál es la empresa causante. No obstante, según indican desde el Parque Tecnológico, no se trata de un plan con fin coercitivo y sancionador, sino que su objetivo es el de servir como instrumento que ayude y asesore a las empresas para que incorporen medidas que eviten vertidos a los ríos.
PROYECTOS PENDIENTES
Además de la protección de los ríos, otra de las acciones previstas para mejorar la gestión ambiental en el área industrial de San Cibrao es la creación de un Centro Verde de clasificación de residuos, que se ubicará en una parcela del polígono industrial. Se trata de una demanda que los empresarios llevan formulando desde hace prácticamente 10 años, con el fin de facilitar y abaratar la gestión de los residuos que generan, y cuya construcción han ido demorando los sucesivos Gobiernos autonómicos. En abril, la Xunta aprobaba la inversión de 975.556 euros en esta planta, pero no anunció aún cuándo se iniciarán las obras ni la fecha de entrada en servicio.
El 'Centro Verde' gestionará residuos industriales no peligrosos, encargándose de su recepción, clasificación y transporte a empresas de reciclaje o gestores autorizados. Para ello contará con contenedores de diversos tipos, un almacén de neumáticos fuera de uso y una caseta para recoger residuos que requieran especial cuidado, como para aceites, disolventes, aerosoles, baterías, pilas o fluorescentes.
En ese encuentro se informará sobre el plan de visitas a las empresas, que establecerá su clasificación en cuatro categorías según el potencial de contaminación. Así, por una parte, determina las firmas poco susceptibles de producir vertidos contaminantes y, por otra, aquellas que sí los pueden generar, clasificadas según el nivel de toxicidad sea alto, muy alto o extremo.
En la reunión, también se informará a los empresarios de las medidas de control que se están estableciendo entre los Concellos de San Cibrao y Pereiro junto a la Diputación de Ourense, a través de la empresa AquaOurense, para evitar que se produzcan vertidos a los ríos.
El plan establece acciones de control para la detección de vertidos o compuestos tóxicos que se puedan producir, su detección en tiempo real (a través de cuatro puntos de alerta) para poder establecer un plan de intervención en la depuradora de San Cibrao das Viñas y, además, poder determinar cuál es la empresa causante. No obstante, según indican desde el Parque Tecnológico, no se trata de un plan con fin coercitivo y sancionador, sino que su objetivo es el de servir como instrumento que ayude y asesore a las empresas para que incorporen medidas que eviten vertidos a los ríos.
PROYECTOS PENDIENTES
Además de la protección de los ríos, otra de las acciones previstas para mejorar la gestión ambiental en el área industrial de San Cibrao es la creación de un Centro Verde de clasificación de residuos, que se ubicará en una parcela del polígono industrial. Se trata de una demanda que los empresarios llevan formulando desde hace prácticamente 10 años, con el fin de facilitar y abaratar la gestión de los residuos que generan, y cuya construcción han ido demorando los sucesivos Gobiernos autonómicos. En abril, la Xunta aprobaba la inversión de 975.556 euros en esta planta, pero no anunció aún cuándo se iniciarán las obras ni la fecha de entrada en servicio.
El 'Centro Verde' gestionará residuos industriales no peligrosos, encargándose de su recepción, clasificación y transporte a empresas de reciclaje o gestores autorizados. Para ello contará con contenedores de diversos tipos, un almacén de neumáticos fuera de uso y una caseta para recoger residuos que requieran especial cuidado, como para aceites, disolventes, aerosoles, baterías, pilas o fluorescentes.
