Expertos ahondaron en el Campus de Ourense sobre las consecuencias de un plan urbanístico obsoleto
El plan urbanístico de Ourense, elaborado en 1986, (el famoso PXOM), agota a ciudadanos y emprendedores por la dificultad de sacar adelante proyectos con una normativa tan rígida y obsoleta. La inseguridad jurídica y la falta de liderazgo del gobierno municipal para promover un urbanismo actualizado centraron ayer una conferencia en el Campus de Ourense, moderada por el profesor y exportavoz socialista en el Concello de Ourense, José Ángel Vázquez Barquero. “A ordenación do territorio e o planeamento urbanístico como instrumentos de desenvolvemento económico” fue el título del debate que, en un primer momento, no abundó en la situación concreta de Ourense, con proyectos frenados por un plan antiguo. Sin embargo, los actores sociales que participaban en la mesa, dada su vinculación a la ciudad, se tiraron finalmente al barro para criticar la parálisis que sufre Ourense sin un PXOM acorde a las necesidades de 2023.
Vázquez Barquero introdujo la charla en la que participaron Elvira Carregado, arquitecta municipal del Concello; Lucila Vázquez-Gulías, abogada y presidenta del Centro Cultural Daniel Vázquez Gulías; Alberto de Paula, arquitecto y expresidente del Colegio de Arquitectos de Ourense y Julio Iglesias, consejero delegado del Grupo REVI.
Carregado apuntó que “un plan general de urbanismo no genera puestos de trabajo, y el ejemplo es nuestra ciudad”. La arquitecta municipal señaló que la planificación urbanística “necesita de un buen equipo, pero también de un buen gobierno que lo dirija”.
Vázquez-Gulías insistió en que el PXOM es “totalmente necesario” para el desarrollo económico de la ciudad. “No podemos permitirnos estar sin plan y que la ciudad se estanque”, añadió la abogada, que tildó de “rígidos” los planes urbanísticos.
En la misma línea, Alberto de Paula recordó que el PXOM es de 1986, pero “ya se empezó a pensar en 1977”. “Los planeamientos deben ser mucho más flexibles, instrumentos para transformar la sociedad y el territorio. Lo que pasó es que empezó a funcionar el urbanismo corrupto y urbanístico”. Criticando también la falta de liderazgo político, recordó que “el papel lo puede todo, pero luego hace falta gestionar e ir al barro, que es donde fallamos”. De Paula abogó por planes “supramunicipales” y “pelear” por infraestructuras “muy necesarias” en la provincia. Citó las conexiones con Vigo, Ponferrada y Lugo, así como la Variante Exterior.
Mucho más crítico en el debate fue Julio Iglesias: “Me da mucha pena lo que llevamos viviendo en Ourense en los últimos 25 años en materia de urbanismo, ver el fango en el que estamos metidos por un documento en una ciudad de más de 100.000 habitantes. Es tremendo”. El consejero delegado del Grupo REVI apuntó a la “inseguridad jurídica constante” y tildó de “valientes” económicamente a los emprendedores que resisten en la ciudad. “Hay que coordinarse para que no nos vayamos todos de aquí”. Como empresario, censuró la falta de suelo industrial y la “descoordinación constante” entre administraciones.
Previsión de empleo
Barquero quiso limitarse a moderar el debate, destacando lo que le pareció más relevante de cada ponente. De Carregado subrayó la idea de que el PXOM no generó empleo. Sobre el discurso de Vázquez-Gulías comentó la “dualidad de competencias”. En cuanto a De Paula, a Barquero le pareció interesante “la falta de gestión”. Por último, del empresario Julio Iglesias, subrayó la falta de suelo, la inseguridad jurídica y la incertidumbre. El profesor del Campus y ex portavoz del PSOE en el Concello de Ourense confesó finalmente que le costaba “morderse la lengua” y que “en otros países no solo se tiene en cuenta la previsión de crecimiento de la población, sino la previsión de empleo y las necesidades para que ese empleo se genere”.
