Reclaman un abogado para impugnar la subasta del inmueble y una investigación sobre la misma

Los residentes del hotel de Benposta recurren a la Fiscalía para evitar la orden de desahucio

Imagen del antiguo hotel de Benposta, donde residen una veintena de jóvenes. (Foto: Miguel Ángel)
Un representante de los 22 jóvenes que residen en el antiguo hotel de Benposta han solicitado el amparo de la Fiscalía, reclamando que se les asigne un abogado para que les represente en la impugnación de la subasta del hotel realizada en octubre.
Los residentes en el hotel de Benposta temen ser desahuciados. Por ello, ayer presentaron un escrito ante la Fiscalía de la Audiencia provincial con un doble objetivo: por un lado, que inste al Colegio de Abogados a que les asigne un abogado de oficio para reclamar la impugnación de la subasta del hotel -ya solicitaron un letrado en octubre del año pasado- y, por el otro, que investigue las supuestas irregularidades del expediente de subastas.

Los residentes afirman en su escrito que ‘no se entiende que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), conociendo las causas judiciales pendientes, algunas de las cuales hablan de apropiación ilegal de los terrenos de la asociación Ciudad de los Muchachos a favor de una fundación, publique y saque a subasta parte de las instalaciones’. Señalan, además, que ‘menos se entiende que se le permita a Jesús Silva presentarse a las subastas con un testaferro, que ese testaferro después efectúe una cesión a favor de una fundación interpuesta (Orozco), que pague con un pagaré sin fondos al INSS, que el INSS en vez de denunciarles por estafa, llega a un acuerdo y acceda a que el importe del depósito, 330.000 euros que tuvieron que depositar para poder concursar, sea el precio de la gasolinera’.

Los residentes en el hotel explican en su escrito que ‘estamos en Benposta este grupo o colectivo de muchachos a los que el Jesús Silva dejó indocumentados, impidiendo de esa manera que podamos encontrar un puesto de trabajo, lo que impide además que podamos integrarnos de manera normal en la sociedad. Llegamos de niños de nuestros países y hemos sufrido desarraigo y otro tipo de abusos. No es de recibo que a día se nos devuelva a un lugar del que desconocemos todo’. Asimismo, aseguran que han sufrido ‘amenazas y coacciones’ y que ‘no sabemos a qué atenernos, ya que nos presionan por todos los lados para que nos vayamos a la calle’.


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