Los concellos se aprietan el cinturón por la crisis y, a tenor de los datos que maneja la Asociación provincial de empresarios de la construcción, la inversión es uno de los capítulos preferidos por los alcaldes a la hora de pasar la tijera. Así, de los 92 municipios de la provincia sólo 13 licitaron obras en el primer semestre del año, lo que supone una reducción considerable con respecto al mismo periodo de 2010, cuando fueron 53 los concellos inversores.
Las cifras resultan peores si se tiene en cuenta la cantidad total invertida: casi 4,8 millones de euros, de los que más de la mitad (2,5 millones) fueron invertidos por un único Concello, el de la ciudad. Los otros 12 -Castrelo de Miño, Celanova, Cualedro, Esgos, O Irixo, Lobeira, A Merca, Muiños, San Amaro, San Cibrao, Verín y Vilamarín- se reparten el resto de inversiones, siendo el de Celanova el que licitó obras por cuantías más elevadas (433.000 euros) y Lobeira y San Amaro, con 60.000 y 48.000 euros, las de menos. Con todo, en los seis primeros del año pasado las licitaciones de los concellos ourensanos ascendieron a 26.250.537 euros, de los que 10,6 millones se correspondían al de la ciudad.
Para los constructotres, la falta de capacidad inversora de los concellos 'perjudica notablemente a las pequeñas y medianas empresas, que tenían en las inversiones municipales una importante oportunidad de trabajo'. El sector alerta de que la obra pública licitada por otras administraciones tampoco favorece a estas empresas, un 95% del total, toda vez que 'no pueden optar a proyectos de mayor envergadura como los que, en este caso, han licitado Estado y Xunta'. Se refieren a obras como del AVE, la rehabilitación del Banco de España y el proyecto de reforma de la estación, entre otras.
Los constructores ourensanos llaman la atención en su informe de la 'lentitud generalizada' de todas las administraciones en lo que se refiere a la tramitación de los expedientes de las obras ya licitadas. A su juicio, esto provoca un importante retraso en su ejecución, 'con la consiguiente repercusión en la generación de empleo y la superviviencia de las empresas'.
Asimismo, el sector muestra su preocupación por la reducción en un 76% de licitaciones por parte de los concellos y el hecho de que, de los 375 proyectos licitados en este periodo, 340 tengan un presupuesto inferior a los 300.000 euros. De hecho, la mayor inversión es la realizada por el Concello de Ourense en el centro de conocimiento de La Molinera, que supera el millón de euros.
Del resto de administraciones, el Estado acapara el 62,27% tras licitar el tramo A Canda-Vilavella (58,8 millones), la reforma del Banco de España (4,6 millones) y el proyecto de reforma de la estación. La siguiente administración inversora es la Xunta que, con todo, reduce en un 42,31% su inversión. En total, nueve obras concentran el 85,4% de la inversión pública en este primer semestre del año
Para los constructotres, la falta de capacidad inversora de los concellos 'perjudica notablemente a las pequeñas y medianas empresas, que tenían en las inversiones municipales una importante oportunidad de trabajo'. El sector alerta de que la obra pública licitada por otras administraciones tampoco favorece a estas empresas, un 95% del total, toda vez que 'no pueden optar a proyectos de mayor envergadura como los que, en este caso, han licitado Estado y Xunta'. Se refieren a obras como del AVE, la rehabilitación del Banco de España y el proyecto de reforma de la estación, entre otras.
Los constructores ourensanos llaman la atención en su informe de la 'lentitud generalizada' de todas las administraciones en lo que se refiere a la tramitación de los expedientes de las obras ya licitadas. A su juicio, esto provoca un importante retraso en su ejecución, 'con la consiguiente repercusión en la generación de empleo y la superviviencia de las empresas'.
Asimismo, el sector muestra su preocupación por la reducción en un 76% de licitaciones por parte de los concellos y el hecho de que, de los 375 proyectos licitados en este periodo, 340 tengan un presupuesto inferior a los 300.000 euros. De hecho, la mayor inversión es la realizada por el Concello de Ourense en el centro de conocimiento de La Molinera, que supera el millón de euros.
Del resto de administraciones, el Estado acapara el 62,27% tras licitar el tramo A Canda-Vilavella (58,8 millones), la reforma del Banco de España (4,6 millones) y el proyecto de reforma de la estación. La siguiente administración inversora es la Xunta que, con todo, reduce en un 42,31% su inversión. En total, nueve obras concentran el 85,4% de la inversión pública en este primer semestre del año
