La tormenta reventó las calles de Ourense

La calle Celso Emilio, con el asfalto levantado y la Policía Local cortando el acceso.
photo_camera La calle Celso Emilio, con el asfalto levantado y la Policía Local cortando el acceso.
Celso Emilio Ferreiro tuvo que ser cortada por la rotura de una tubería: el asfalto y la acera quedaron totalmente levantados y una comunidad de vecinos se vio afectada cuando el agua se introdujo en los ascensores y en el garaje

La predicción meteorológica anunciaba que una fuerte tormenta caería sobre la ciudad el día de las elecciones. Y acertó. Tras una mañana sin lluvias, el temporal se cebó con la ciudad. La calle Celso Emilio Ferreiro quedó completamente intransitable, desde el número 1 hasta el 19; el asfalto se levantó por el estallido de una tubería y el desbordamiento de varias alcantarillas. 

Una de las aceras perdió casi todas las baldosas y en el asfalto se generaron pequeños montículos, como si hubiese pasado un terremoto. Además, un negocio y un portal, en los números 9 y 11, quedaron anegados por el efecto de la lluvia. Solo entre las 16,30 y las 17,30 se acumularon más de 14 litros por metro cuadrado.

En cuanto recibió el primer aviso, la Policía Local acudió a cortar la calle y a asistir a los vecinos. También se acercaron dos técnicos de Viaqua, que explicaron que “el diámetro de la tubería no fue capaz de asumir la cantidad de agua que estaba pasando y por ello llegó a estallar”. 

Por ahora, los profesionales desconocen el tiempo que tendrá que estar cortada la calle. El Concello tendrá que ser quien decida el procedimiento. Además de asegurar la zona, durante toda la tarde estudiaron si será necesario reconstruir la parte de la vía levantada, así como las aceras. 

Friki Vila es la “escape room” que resultó afectada por la tormenta: el agua comenzó a entrar sin control en las instalaciones e inundó la entrada por completo. Algunos objetos decorativos del local se estropearon y su dueño, Mario, sacó la balsa de agua como pudo, a golpe de escoba. 

En el edifico contiguo, el 11, los vecinos salían a la calle para evaluar los daños en su portal. El agua llegaba hasta al ascensor, llegando a entrar en el hueco y dejándolo completamente inutilizable. El garaje del edificio también se vio afectado, una hora más tarde de que reventase la tubería, el agua se empezó a filtrar llegando a los vehículos. Los bomberos intervinieron en la infraestructura. 

Los vecinos de la zona advirtieron que no es la primera vez que viven una situación parecida, pero sí la peor que recuerdan. “El alcantarillado está mal desde hace mucho tiempo y nunca se hace nada”, señalaron los allí presentes. 

Por otra parte, el festival Ouren Sound Fest fue previsor y canceló el concierto de Brais das Hortas en los jardines del Padre Feijóo, previsto para las 12,00 del mediodía. Anunciarán próximamente otra fecha.

El chaparrón pilló por sorpresa al club de natación sincronizada de Ourense, en plena competición en la piscina Rosario Dueñas con otros clubes gallegos. Las goteras se colaron en el vaso de la competición, un problema en el tejado que clubes deportivos ya habían denunciado en otras ocasiones.

Las calles de Sobradelo (Carballeda de Valdeorras) se convirtieron en arroyos, arrastrando gran cantidad de tierra y piedras de los montes que fueron devastados por el gran incendio de julio de 2022. Trabajadores del Concello se movilizaron con una pala mecánica y apoyados por vecinos para retirar los arrastres que obligaron a cortar el tráfico. Por otro lado, en Valdeorras viven expectantes la situación de los viñedos, ya que cayó agua con piedra en varios puntos.

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