Con la llegada del mes de julio, la cara del turismo en Ourense ha cambiado. De los grupos de jubilados que acostumbran a pasear por las calles de la ciudad se ha pasado a un turismo familiar
o en pareja.
Los grandes grupos de visitantes a la ciudad, en su mayoría jubilados, dejaron paso desde la pasada semana con la entrada del mes de julio, a un turismo más familiar o en pareja. La mayoría procede de otras comunidades autónomas como País Vasco, Madrid, Barcelona, Asturias o Andalucía, según informan desde la Oficina Municipal de Turismo, ya que la mayor parte de los europeos que se dejan caer por la ciudad son, sobre todo, peregrinos, que, por cierto acuden a la Oficina a preguntar por el albergue, así que tal vez habría que reconsiderar se su señalización es la adecuada.
Las Burgas continúan siendo la joya de la corona, aunque no sucede lo mismo con el Centro de Interpretación, donde los visitantes acuden con cuentagotas. Este fin de semana no se notó especialmente que fuera el primer fin de semana de vacaciones para muchos. Algún inglés y algún francés fueron la nota internacional de estos dos días. Eso sí, no suelen necesitar mucha información adicional. Según indica la persona responsable del Centro este domingo, "la mayoría lee los carteles que están escritos en varios idiomas y con los folletos que cogen ya tienen suficiente. No suelen preguntar gran cosa".
A la espera del mes grande para el turismo en la ciudad, que es agosto "cuando más se nota la presencia de gente de fuera, nuestra época fuerte", en la Oficina de Turismo destacan que la mayoría de sus usuarios suelen preguntar por el área termal, el casco histórico y por lugares donde comer. "Aunque casi todos ya conocen parte de la riqueza de aguas que tenemos y preguntan directamente por ello".
Los turistas también suelen preguntar por los atractivos de la provincia, para visitarlos sobre todo si se quedan más de un día. La respuesta es sencilla, como sucedió en la mañana de ayer a una pareja de Madrid: "Esto es una oficina municipal, por lo que no tenemos folletos ni información sobre la provincia". Aunque claro está, siempre hay una excepción, en este caso la Ribeira Sacra. "De esta zona siempre tenemos algo para poder dar a los turistas", aseguran. En cualquier caso, los clientes de la Oficina se van satisfechos por el trato recibido y conformes con la información que sobre la ciudad se les proporciona, aunque sí lamentan que "nos gustaría poder tener una visión general de toda la provincia, para aprovechar mejor estos días", aseguraba una joven.
