La Xunta dejó en manos de los alcaldes y padres de los escolares de Os Blancos, Calvos de Randín y Baltar la agrupación de los tres colegios en uno solo ante la falta de alumnado. El propio delegado territorial en Ourense, Rogelio Martínez, ponía como ejemplo para la posible fusión el cierre, a principios del pasado curso, del colegio de Infantil y Primaria de Gomesende y el traslado de los 17 escolares a los centros de enseñanza de Celanova y Ramirás.
'Tras iniciarse o curso e ante a falla de alumnado, os pais comenzaron a remitir escritos e, despois dunha una reunión, uns acordaron matricular ós seus fillos en Ramirás e outros en Celanova', apuntó, recalcando que respecto a los centros educativos de Baltar, Os Blancos y Calvos de Randín aún no hay tomada ninguna decisión definitiva. 'O que se plantexou ós alcaldes é unha reflexión sobre a situación actual dos colexios para que tomen medidas'.
A su entender, regidores y padres de los alumnos algo tienen que hacer 'porque un colexio con seis ou sete alumnos ten moi pouco futuro', demasiado costoso, reconoció. Sus palabras no coinciden con la Consellería de Educación, que ayer hizo público un comunicado en el que afirma que no tiene previsto cerrar ningún centro educativo y que está 'apostando' por la enseñanza en el medio rural gallego.
Pero esa vaga declaración no acaba de convencer a los alcaldes y a parte de los padres de los alumnos, máxime cuando la posible fusión de los tres colegios ya fue abordada a principios del actual curso. 'Hubo unha reunión entre os pais, á que non acudiu ningún representante de Educación, pero non chegaron a ningún acordo', recordó Rogelio Martínez.
LOS PADRES
En la citada reunión estuvo Rosa Bello, una vecina de Baltar, que tiene dos hijos en edad escolar, a los que dio de baja en el colegio del municipio para matricularlos en Xinzo. 'Non chegamos a ningún acordo, porque os de Baltar pediamos que se mantivera aberto o noso centro porque é mais novo e os de Os Blancos, antes de vir a Baltar, preferían ir a Xinzo. Nós tampouco tiñamos interés en ir a Os Blancos porque a carretera e moi mala', aseguró, añadiendo que los padres de Calvos 'xa nin chegaron a vir a reunión'.
A esta madre ya no le importa la fusión de los colegios porque mantiene a sus hijos matriculados en Xinzo, pero asegura que los dio de baja en el colegio de Baltar 'porque hai unha soa profesora para todos os cursos. Os meus nenos son de Infantil e cunha maestra soa creo que non ía ter a atención adecuada', comentó.
Sin embargo, José Alvarez, que tiene dos hijos matriculados en Calvos, es partidario de la agrupación. 'Se son máis alumnos tamén haberá máis profesores e mellorará a calidade da enseñanza', explicó, recalcando que la unión de los tres colegios debe llevar implicada una mejora de los accesos entre los tres municipios, cuyas capitalidades están separadas por una media de cinco kilómetros.
Este argumento no es compartido por parte de los padres de Os Blancos, que ponen como condición el mantenimiento de su colegio alegando que es el que tiene más alumnos, 13 en total. 'Antes de ir a Baltar nos queda más cerca Xinzo', dice José Manuel Andrade.
A su entender, regidores y padres de los alumnos algo tienen que hacer 'porque un colexio con seis ou sete alumnos ten moi pouco futuro', demasiado costoso, reconoció. Sus palabras no coinciden con la Consellería de Educación, que ayer hizo público un comunicado en el que afirma que no tiene previsto cerrar ningún centro educativo y que está 'apostando' por la enseñanza en el medio rural gallego.
Pero esa vaga declaración no acaba de convencer a los alcaldes y a parte de los padres de los alumnos, máxime cuando la posible fusión de los tres colegios ya fue abordada a principios del actual curso. 'Hubo unha reunión entre os pais, á que non acudiu ningún representante de Educación, pero non chegaron a ningún acordo', recordó Rogelio Martínez.
LOS PADRES
En la citada reunión estuvo Rosa Bello, una vecina de Baltar, que tiene dos hijos en edad escolar, a los que dio de baja en el colegio del municipio para matricularlos en Xinzo. 'Non chegamos a ningún acordo, porque os de Baltar pediamos que se mantivera aberto o noso centro porque é mais novo e os de Os Blancos, antes de vir a Baltar, preferían ir a Xinzo. Nós tampouco tiñamos interés en ir a Os Blancos porque a carretera e moi mala', aseguró, añadiendo que los padres de Calvos 'xa nin chegaron a vir a reunión'.
A esta madre ya no le importa la fusión de los colegios porque mantiene a sus hijos matriculados en Xinzo, pero asegura que los dio de baja en el colegio de Baltar 'porque hai unha soa profesora para todos os cursos. Os meus nenos son de Infantil e cunha maestra soa creo que non ía ter a atención adecuada', comentó.
Sin embargo, José Alvarez, que tiene dos hijos matriculados en Calvos, es partidario de la agrupación. 'Se son máis alumnos tamén haberá máis profesores e mellorará a calidade da enseñanza', explicó, recalcando que la unión de los tres colegios debe llevar implicada una mejora de los accesos entre los tres municipios, cuyas capitalidades están separadas por una media de cinco kilómetros.
Este argumento no es compartido por parte de los padres de Os Blancos, que ponen como condición el mantenimiento de su colegio alegando que es el que tiene más alumnos, 13 en total. 'Antes de ir a Baltar nos queda más cerca Xinzo', dice José Manuel Andrade.
