El blanco y el negro se impusieron en las colecciones de 'prêt-à-porter' para el próximo otoño-invierno de Dévastée, Anthony Vaccarello y Moon Young Hee, que se presentaron ayer en la jornada inaugural de la Semana de la Moda de París.
La pareja de diseñadores franceses Ophélie Klere y François Alary, alma de Dévastée, dotó de una sonrisa a las regaderas, carretillas, azadas e incluso a las tumbas que configuran los estampados bicolor de unos diseños divertidos y a contracorriente. 'Esta colección se basa en algo más cerebral que de costumbre', aseguró Klere, quien explicó que se inspiraron en elementos concretos de su región, el sudoeste de Francia, para crear unos dibujos que están presentes en el 70 % de las prendas. Estas ilustraciones con un punto infantil resaltan gracias al contraste del blanco y el negro, únicos protagonistas de la pasarela.
AJUSTADO Y RIGUROSO
Anthony Vaccarello defendiópor su parte unas prendas ajustadas en negro riguroso con destellos metálicos, en su desfile celebrado en los fastuosos salones del Hotel Salomon de Rothschild, en el exclusivo octavo distrito de París. El desfile representó el pistoletazo de salida de la Made Fashion Week, iniciativa importada de Nueva York que apadrina a talentos emergentes.
Antes, la diseñadora surcoreana Moon Young Hee había roto el hielo al abrir la primera jornada con un desfile que se celebró en los salones del Hotel de Varengeville. La mañana era fría y en este espacio de luz antigua y sofisticada, los drapeados y superposiciones en blanco y negro, con incursiones en crema y marino, fueron moldeando unos diseños voluminosos de formas rígidas. Los pantalones son de pata de elefante o subyacen bajo largas faldas, mientras que las gabardinas evolucionan hasta asemejarse a capas monacales.
La firma Ground Zero definió por su parte sus intenciones en su segundo desfile en el calendario oficial de París, en el que los hermanos Philip y Eri Chu apostaron por las mallas con torera en una temporada otoño-invierno en colores flúor.
AJUSTADO Y RIGUROSO
Anthony Vaccarello defendiópor su parte unas prendas ajustadas en negro riguroso con destellos metálicos, en su desfile celebrado en los fastuosos salones del Hotel Salomon de Rothschild, en el exclusivo octavo distrito de París. El desfile representó el pistoletazo de salida de la Made Fashion Week, iniciativa importada de Nueva York que apadrina a talentos emergentes.
Antes, la diseñadora surcoreana Moon Young Hee había roto el hielo al abrir la primera jornada con un desfile que se celebró en los salones del Hotel de Varengeville. La mañana era fría y en este espacio de luz antigua y sofisticada, los drapeados y superposiciones en blanco y negro, con incursiones en crema y marino, fueron moldeando unos diseños voluminosos de formas rígidas. Los pantalones son de pata de elefante o subyacen bajo largas faldas, mientras que las gabardinas evolucionan hasta asemejarse a capas monacales.
La firma Ground Zero definió por su parte sus intenciones en su segundo desfile en el calendario oficial de París, en el que los hermanos Philip y Eri Chu apostaron por las mallas con torera en una temporada otoño-invierno en colores flúor.
