El pintor ourensano Antón Pulido ((Bóveda de Amoeiro, 1944) inauguró ayer en el Museo de Pontevedra la muestra de su colección Kermesse, retrospectiva de su obra que vuelve a Galicia tras su paso por Taiwan o Corea.

Pontevedra recibe a Pulido

El pintor ourensano (derecha), con las autoridades presentes en la inauguración de la muestra. (Foto: DIARIO DE PONTEVEDRA)
Kermesse es la palabra que define la muestra inagurada ayer en el Museo de Pontevedra, formada a base de obras inéditas, creadas con un lenguaje abstracto completamente actual y contemporáneo, con el color como protagonista y producto de una evolución de toda una vida dedicada a la pintura. Se trata un término flamenco con el que se define el concepto de las emociones en todos los sus sentidos, una interesante serie en la que el autor lleva trabajando desde 2006 y que ya ha llegado a países del Oriente.
Las 'kermeses' son para al autor ourensano la representación del bullicio, una referencia a la celebración, un homenaje a la alegría de vivir. Emociones de felicidad que son traducidas en composiciones rítmicas y coloristas, que por primera vez se muestran en el Museo de Pontevedra. Tras varias exposiciones en Asia, por primera vez Pulido las muestra en Galicia. De Pontevedra, y con paradas en Ourense o Lugo, saldrán sus obras después hacia Nueva York, París, Londres o Nueva Delhi.

De la colección de piezas que ahora muestra en Pontevedra, el autor siempre ha destacado 'el ritmo, el movimiento y el color'. 'Son obras', explicaba recientemente, 'que rayan la abstracción, pero con latidos de vida. Destacan por su fuerza cromática, porque ahora le doy mucha importancia al color, y por su carácter gestual. Antes me preocupaba más el tema, pero ahora la figura desaparece y llega la abstracción y el gesto'.

Se trata pues de 'una pintura equilibrada, alegre y vitalista que refleja la actitud positiva y la madurez creativa del autor', tal y como define la crítica especializada el trabajo de Antón Pulido que ahora se puede contemplar en Pontevedra en su primera parada en Galicia.

El ourensano es una referencia obligada en la creación artística no sólo de Galicia, siendo además referente al hablar de arte gallega contemporánea. Afincado en Vigo, el autor regresa con la muestra inaugurada ayer en Pontevedra, con la que no dejado de recibir elogios de la crítica internacional. La presentación coincide además con la edición del libro catálogo de su trayectoria artística.

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