Siempre habrá incendios, pero tomando precauciones se puede reducir de forma muy importante tanto la cantidad de incendios como su extensión.
Por ello, ahora que suben las temperaturas de cara al verano, La Región trae este artículo en el que se destacan unos pocos consejos útiles que pueden ser de ayuda. Numerosas zonas de Ourense tienen alto riesgo de incendio forestal.
Causas comunes de los incendios forestales
Los incendios forestales no empezaron con el ser humano, por supuesto, pero la mano del hombre está detrás de más de 9 de cada 10 de ellos. Eso sí, no hay que confundir la culpabilidad del hombre con la intencionalidad directa. Eso sí, los incendios intencionados siguen siendo la mayoría, en torno al 60% en España según los datos del propio gobierno.
El Gobierno tiene recogido en sus bases de datos que, por otro lado, en torno al 25% de los incendios forestales suceden a consecuencia de una negligencia o accidente. En este sentido, estamos hablando de colillas mal apagadas y quemas de matorrales o basura que se complican, por ejemplo.
Además, un pequeño porcentaje de incendios, menos del 5%, surgen como la reproducción de otro fuego anterior que no llegó a extinguirse del todo.
Cómo prevenir incendios forestales
Siguiendo unas normas básicas, se puede reducir la posibilidad de que surja un nuevo incendio. Entre los consejos clave, podemos enumerar algunos de ellos.
- No hacer fuego en época de incendios, cuando las llamas, de originarse, se extenderán con suma facilidad
- No dejar abandonados residuos que pueden actuar como lupa y provocar fuego (es el caso de objetos de cristal, por ejemplo)
- Aparcar los coches en zonas habilitadas para ello y libres de matorrales, para evitar que se genere un incendio inesperado
Cómo actuar en caso de incendio forestal
El tiempo es clave a la hora de reaccionar cuando surge un incendio. Lo prioritario, lo primero de todo, es llamar al 112 o al 062, teléfonos de Emergencias y de la Guardia Civil, respectivamente.
Y, por supuesto, se debe escapar para evitar el peligro, huyendo en contra de la dirección del viento. Además, por supuesto, cuando se trata de huir por la montaña, debe evitarse escapar ladera arriba o hacia un precipicio, lo cual nos impedirá el avance. Además, el fuego se desplaza ladera arriba.
En el caso de que el incendio nos alcance, debemos situarnos en zonas ya quemadas; y, si llega a prender nuestra ropa, lo siguiente que debemos hacer es tirarnos al suelo y rodar.
En caso de que el incendio nos pille en la carretera, también hay consideraciones que debemos tener muy en cuenta, como hemos apuntado en anteriores artículos.
