Los problemas generados por las condiciones meteorológicas no impidieron que la campaña que toca a su fin pueda ser considerada buena.
La lluvia y, especialmente, las altas temperaturas -impropias de esta época del año-, afectaron negativamente al fruto recogido durante la campaña de la castaña. "Con temperaturas altas, a castaña se deteriora rápidamente", explicó Jesús Quintá García, presidente del a Indicación Xeográfica Protexida Castaña de Galicia. "Las altas temperaturas estropearon mucho fruto. Hizo mucho calor y llovió", corroboró el comercializador de O Barco Francisco Barredo González, presidente de Exportadores de Productos Agrosilvestres de Galicia (Proagrosilva).
Los problemas generados por las condiciones meteorológicas no impidieron que la campaña que toca a su fin pueda ser considerada buena. Jesús Quintá estimó el volumen de castaña recogido en Galicia en aproximadamente 20 millones de kilos, de los cuales el 60 % proceden de sotos ourensanos, según puntualizó Francisco Barredo. "A campaña foi mellor que a do año pasado, que tamén foi boa", valoró Jesús Quintá, a la espera de conocer los datos de los comercializadores.
El calor y la lluvia no fueron los únicos condicionantes de la campaña. También hay que hablar de las dos semanas de adelanto, que influyó negativamente en la demanda. "Ó non facer frío, non apetece a castaña", explicó el presidente de Castaña de Galicia. También echó en falta una mayor selección del fruto, quejándose de que muchos productores no apartaron la castaña podrida.
"O mercado esixe calidade", dijo Jesús Quintá. Este factor pudo influir en los bajos precios que se pagaron este año. En algunos casos, estos alcanzaron los 2 euros por kilo los primeros días de la campaña. Después, se desplomaron, llegando a aproximarse muchas veces a 0,50 euros.
Los precios pagados en 2014 -superando habitualmente 1,5o euros por kilo- fueron, para Jesús Quintá y Francisco Barredo, excesivos. "Cuando un producto es muy caro, la gente busca alternativas", explicó el barquense, refiriéndose al parón de la demanda de la castaña gallega. También aludió a la recuperación de la producción en Italia, que restó este mercado.
