Un grupo de vecinos de Mouruás (San Xoán de Río) que residen en Madrid promueve la Fundación Val do Navea, que será constituida en un plazo de dos meses por vecinos, asociaciones, concellos y administraciones con el fin de desarrollar un proyecto de revitalización socioeconómica que pasa por la recuperación de los recursos autóctonos ganaderos, forestales, agrícolas, cinegéticos y turísticos. El objetivo es frenar el descenso de población y generar empleo en ocho concellos del Macizo Central ourensano.
San Xoán de Río y Trives fueron la sede dos reuniones para avanzar en los trámites de constitución de la Fundación Val do Navea que promueve un grupo de emigrantes de Mouruás (San Xoán de Río) con el fin de acometer un proyecto de revitalización socioconómica que pasa por la recuperación de los recursos ganaderos, forestales, cinegéticos, agrícolas y turísticos de ocho municipios del Macizo Central ourensano (San Xoán de Río, Castro Caldelas, Chandrexa, Manzaneda, Montederramo, A Teixeira, A Pobra de Trives y Parada do Sil).
José Manuel Sabín, historiador que trabaja en la Uned en Madrid oriundo de Mouruás y promotor de la iniciativa, señala que se trata de un proyecto colectivo que no se sujetará si no se implican los miembros que se integren en el patronato de la fundación. Explicó que, en este momento, un equipo multidisciplinar formado por veterinarios, ingenieros y expertos en turismo, entre otros, está desarrollando el proyecto, que contempla la puesta en valor de viñedos cultivados en bancales desde la época romana, la recuperación del porco celta, la vaca rubia galega, los castaños y frutales con el fin de materializar explotaciones para la comercialización de productos de calidad que supondrán la creación de empleo.
Sangría demográfica
La declaración por parte de Medio Ambiente de paisaje protegido de 700 hectáreas del Val do Navea es muy importante, pero sólo con ella no se frena la sangría demográfica en las 60.000 hectáreas de los ocho concellos, dice José Manuel Sabín, que cita como dato la despoblación que registraron los ocho municipios en 10 años, que pasó de 11.601 habitantes en 1996 a 9.018 en 2008. Precisamente, San Xoán de Río es el municipio gallego con la edad media más alta, 60,5 en el 2007.
José Manuel Sabín, historiador que trabaja en la Uned en Madrid oriundo de Mouruás y promotor de la iniciativa, señala que se trata de un proyecto colectivo que no se sujetará si no se implican los miembros que se integren en el patronato de la fundación. Explicó que, en este momento, un equipo multidisciplinar formado por veterinarios, ingenieros y expertos en turismo, entre otros, está desarrollando el proyecto, que contempla la puesta en valor de viñedos cultivados en bancales desde la época romana, la recuperación del porco celta, la vaca rubia galega, los castaños y frutales con el fin de materializar explotaciones para la comercialización de productos de calidad que supondrán la creación de empleo.
Sangría demográfica
La declaración por parte de Medio Ambiente de paisaje protegido de 700 hectáreas del Val do Navea es muy importante, pero sólo con ella no se frena la sangría demográfica en las 60.000 hectáreas de los ocho concellos, dice José Manuel Sabín, que cita como dato la despoblación que registraron los ocho municipios en 10 años, que pasó de 11.601 habitantes en 1996 a 9.018 en 2008. Precisamente, San Xoán de Río es el municipio gallego con la edad media más alta, 60,5 en el 2007.
