El pleno de despedida apenas duró cinco minutos y la intervención más larga fue de la secretaria

Manuel Candal agradece la ‘consideración’ de la oposición y recrimina al PP en su despedida

Apenas diez minutos bastaron para que Manuel Candal Candal se despidiese de la alcaldía de Vilamartín, que ejerció durante 36 años. En la carta de despedida, que leyó la secretaria municipal, no descuidó agradecer el apoyo de PSOE y BNG desear que los concejales del grupo municipal del PP “abandonen egoísmos personales”, criticando no haber recibido su ayuda para resolver los problemas de los vecinos. El portavoz “popular”, José Pinto, mostró su deseo de seguir contando con Candal, oferta que éste rechazó.
A las 12,15 horas del miércoles 26 de noviembre, Manuel Candal Candal dejó de ser alcalde de Vilamartín, el cargo que ocupó durante 36 años. Su escrito de despedida lo leyó la secretaria municipal y en él tiene palabras de recuerdo para “mi nieto Luciano, mis nietas Paula y Marta y, también mi biznietecito Manuel”. También aludió “a mi hijo del alma”, a quien solicitó “que siga siendo como es: bueno, servicial, leal, trabajador y responsable con todos”. Sin embargo, no incluyó ninguna alusión a su hija, concejal del grupo “popular” y que se presume como su posible sucesora: María Jesusa Candal. Sentada a su derecha, aunque todo lo alejada que permitió la mesa presidencial, presenció como su padre evitó citarla.

Aunque no realizó ninguna alusión directa a su hija, Manuel Candal, sí se refirió al grupo “popular”, al que pertenece María Jesusa Candal. “La veda fue abierta y lo que nunca creí, fue caer víctima de la honestidad”, dijo el ex alcalde, que hizo público su deseo de “que los que me sucedan abandonen egoísmos personales”, quejándose seguidamente de que “a mí no me ayudaron”.

Una consideración muy distinta le merecen al ex alcalde los concejales de la oposición. Tanto es así que en el escrito reseñó: “Agradezco el respeto y consideración de los grupos del PSOE y del BNG”.

El pleno llevó al Consistorio vilamartinés a numerosos vecinos, pudiendo oírse alguna que otra exclamación durante su desarrollo.

Manuel Candal, también hizo mención de las presiones que asegura haber recibido durante su mandato. “He sido perseguido por mis preocupaciones al buscar soluciones para el bienestar de mis vecinos”, afirmó. Poco después, aseguró haber “recibido ofertas para hacer negocios y ganar dinero, todas las he rechazado”. Además, aludió a una posible manipulación de sus problemas de salud. “Mi enfermedad, que tanto se ha utilizado, la llevo con resignación y no me impedirá preocupaciones por mis vecinos”, dijo.

En la carta también realizó un breve repaso de las obras realizadas y de las que deberá ejecutar su sucesor.
Una vez que la secretaria finalizó la lectura del escrito, comenzó un turno de intervenciones, que abrió el portavoz del PSOE, Santos Prada. El edil comenzó agradeciendo los elogios del ex alcalde, para continuar mostrando su esperanza de “después de la dimisión, logremos subsanar los problemas del Concello”.

El nacionalista José Antonio Rodríguez, si bien agradeció la labor desarrollada por el dimitido alcalde, consideró que “hoxe non é un gran día, pois o partido do grupo de gobierno forzou a súa dimisión. Algo cheira a podrido en Vilamartín ”.

El edil del PP, José Pinto, tras los agradecimientos, señaló su propósito de “que ao formar o novo grupo sexamos capaces de seguir facendo unha gran labor por Vilamartín”. El edil aseguró seguir contando con Manuel Candal, una petición que éste rechazó al finalizar la sesión.




María Jesusa Candal, candidata a alcaldesa

El puesto de Manuel Candal será cubierto por la segunda en la candidatura, su hija María Jesusa Candal Jarrín, según apuntaron fuentes del PP. Pese a ello, nadie descarta por completo al concejal José Pinto. Sin embargo, para que éste pueda acceder a la alcaldía, la segunda de la lista “popular” debería renunciar a la alcaldía, una opción que parece que no ejercerá.

Los cinco concejales del grupo de gobierno distan mucho de ayudar a despejar una incógnita que mantiene en vilo a la población de Vilamartín. Su negativa a realizar declaraciones acerca de la situación que vive el Concello se arrastra desde hace semanas y no finalizará hasta la reunión que deberán mantener con el presidente provincial del partido: José Luis Baltar.

“El mejor respeto al alcalde es no realizar declaraciones”, apuntaba María Jesusa Candal, momentos antes de comenzar el pleno. Añadió que la identidad del futuro alcalde “se dirá en su momento”. José Pinto tampoco habló mucho. “Cando formemos o grupo de goberno, faremos as declarcións oportunas”, dijo.

Mientras, en Ourense, José Luis Baltar indicó en varias ocasiones que el sustituto natural de Manuel Candal debe ser el número dos, María Jesusa Candal, salvo que renuncie a la alcaldía, algo que no se produjo.

En todo caso, el misterio debería estar resuelto para la semana próxima, en el pleno que convocó la secretaria para elegir al alcalde. Tampoco esta fecha es segura, pues se anunció para el tres de diciembre, jueves, aunque el calendario indica que el día tres es miércoles. No obstante, en este caso parece claro que la sesión será el jueves, cuatro de diciembre. Mientras, el Concello funcionará sin alcalde, en una compleja situación de “desgobierno”, causada por el cese de los tenientes de alcalde -María Jesús Candal y José Pinto-, decretado por el ex alcalde.

A su vez, Enrique Álvarez ocupará la plaza de la Corporación que deja vacante Manuel Candal. Aunque el puesto le correspondía a Francisco Javier Folla, éste renunció por su amistad con el ex alcalde.

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