Comenzó a nevar a lo largo de la tarde, llegando a formar una capa de cinco centímetros
de espesor
La estación de montaña de Manzaneda despidió la jornada de ayer cubierta por una capa blanca de aproximadamente cinco centímetros de espesor. El agua de lluvia con la que comenzó la tarde fue sustituida paulatinamente por la nieve, según explicó su director general, Gustavo Samartín Vázquez.
La nieve caída aún no es suficiente para permitir la práctica del esquí y la dirección de Oca Nova Manzaneda deberá aguardar algunos días a que se acumule la cantidad necesaria para poder abrir las pistas. Las previsiones manejadas ayer indicaban que seguiría nevando durante la madrugada y que volverían a caer copos el miércoles, jueves y domingo.
En estos momentos, la estación de montaña tiene todo listo para abrir las pistas nada más lo permitan las condiciones de la nieve. "En cuanto estén para esquiar, nos ponemos los esquíes", dijo Gustavo Samartín.
La nevada registrada durante la jornada de ayer no influyó en el elevado número de reservas para disfrutar del Fin de Año en el complejo, superando incluso las de hace doce meses. Ayer, el restaurante estaba prácticamente completo.
