Los agentes de la Policía Local de A Rúa aumentarán su labor de vigilancia durante el verano. Los cuatro policías que constituyen la plantilla patrullarán las calles en las noches de los viernes y sábados, según anunció ayer el alcalde, Avelino García Ferradal. 'Apoyarán la labor que realiza la Guardia Civil. En esos meses aumenta la población y hay que velar por la seguridad', añadió el regidor.
La jornada de la Policía Local acaba a las 20,00 horas. Esta situación propicia las agresiones nocturnas al mobiliario urbano, como los daños causados en las bicicletas del servicio de préstamo municipal, o la rotura de cristales en las propiedades públicas y privadas. El problema aumenta en los meses de verano, con la llegada de los veraneantes.
Para poder cubrir las noches de los fines de semana, los agentes deberán establecer un sistema de turnos que permita el descanso de dos de ellos durante la semana.
El Concello de A Rúa no puede ampliar el refuerzo de la vigilancia veraniega al resto del año por las limitaciones de la plantilla. La necesidad de más agentes la conoce perfectamente el alcalde de A Rúa. Avelino García pretende solventarlo con la instalación de cámaras de vigilancia en las calles. Son dos los lugares buscados para su instalación: O Aguillón y Doctor Vila.
Antes de instalar los equipos de vigilancia, el Concello deberá recibir el apoyo de la Delegación de Gobierno en Galicia. Pero este respaldo no es fácil de conseguir. Las dificultades fueron comunicadas por el subdelegado del Gobierno en Ourense, Roberto Castro, al alcalde de A Rúa en la reunión que ayer mantuvo la Junta Local de Seguridad. Las dificultades no desaniman a Avelino García. El alcalde pedirá permiso a la Delegación del Gobierno en Galicia y para conseguirlo le comunicará el número de delitos, las zonas que el Concello pretende vigilar o para qué quiere vigilar. Estos detalles fueron informados en una reunión, donde se habló del descenso del número de delitos en los dos últimos años.
Para poder cubrir las noches de los fines de semana, los agentes deberán establecer un sistema de turnos que permita el descanso de dos de ellos durante la semana.
El Concello de A Rúa no puede ampliar el refuerzo de la vigilancia veraniega al resto del año por las limitaciones de la plantilla. La necesidad de más agentes la conoce perfectamente el alcalde de A Rúa. Avelino García pretende solventarlo con la instalación de cámaras de vigilancia en las calles. Son dos los lugares buscados para su instalación: O Aguillón y Doctor Vila.
Antes de instalar los equipos de vigilancia, el Concello deberá recibir el apoyo de la Delegación de Gobierno en Galicia. Pero este respaldo no es fácil de conseguir. Las dificultades fueron comunicadas por el subdelegado del Gobierno en Ourense, Roberto Castro, al alcalde de A Rúa en la reunión que ayer mantuvo la Junta Local de Seguridad. Las dificultades no desaniman a Avelino García. El alcalde pedirá permiso a la Delegación del Gobierno en Galicia y para conseguirlo le comunicará el número de delitos, las zonas que el Concello pretende vigilar o para qué quiere vigilar. Estos detalles fueron informados en una reunión, donde se habló del descenso del número de delitos en los dos últimos años.
