El envejecimiento de la población y la necesidad de adaptar el Hospital comarcal Valdeorras a esta nueva situación fueron puestos sobre la mesa por la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera Álvarez, al justificar la reducción de un médico Urgencias y de un pediatra. 'Temos que adaptar a asistencia á poboación. O reto é poñer en marcha os procesos de crónicos, anciáns e pluripatolóxicos', explicó ayer, en su viaje a O Barco. Aquí, presentó a la nueva gerente ejecutiva del centro hospitalario, Guillermina Agulla Budiño, una presentación que comenzó con las protestas que un grupo de trabajadores, que había mantenido un enc
'Temos que adaptar a asistencia á poboación. O reto é poñer en marcha os procesos de crónicos, anciáns e pluripatolóxicos', explicó ayer, en su viaje a O Barco. Aquí, presentó a la nueva gerente ejecutiva del centro hospitalario, Guillermina Agulla Budiño, una presentación que comenzó con las protestas que un grupo de trabajadores, que había mantenido un encierro de 24 horas, dirigió contra los recortes en la sanidad pública.
La conselleira insistió en su apuesta por la estructura de gestión integrada y descartó que el Hospital de O Barco esté siendo dirigido desde Ourense, como afirma la junta de personal. 'A xestión lévase dacordo con Ourense e con Santiago. Agora mesmo, estamos nomeando unha xerente executiva de xestión integrada. A estructura de xestión integrada é unha maneira de modernizar a xestión tendo en conta ao paciente', aseguró. También salió al paso del temor a que el Hospital se convierta en un centro de especialidades, sin hospitalización. Rocío Mosquera empleó un término nuevo y de difícil pronunciación, 'ambulatorización', para indicar que Sanidade apuesta por este campo. 'Cada vez hai máis procesos ambulatorios. No 60 % dos casos non hai que ingresar', dijo.
La escasez de inversiones en el Hospital también surgió durante su visita. 'É un ano complicado e hai que priorizar. Hai pendiente a dotación dun TAC (escáner). É un vello compromiso da xerente anterior e queremos asumilo. Esperemos que sexa este ano', dijo. Con Rocío Mosquera viajaron la gerente del Servizo Galego de Saúde, María Nieves Domínguez, y la gerente de Xestión Integrada de Ourense, Eloína Núñez. Fueron recibidas por la exgerente del Hospital, María Jesús Magadán.
Momentos antes de la reunión con los profesionales del Hospital, la nueva gerente, Guillermina Agulla, mostró la línea que pretende seguir: 'Avanzar en la atención integral y que la atención primaria tenga continuidad con la especializada', explicó.
La conselleira insistió en su apuesta por la estructura de gestión integrada y descartó que el Hospital de O Barco esté siendo dirigido desde Ourense, como afirma la junta de personal. 'A xestión lévase dacordo con Ourense e con Santiago. Agora mesmo, estamos nomeando unha xerente executiva de xestión integrada. A estructura de xestión integrada é unha maneira de modernizar a xestión tendo en conta ao paciente', aseguró. También salió al paso del temor a que el Hospital se convierta en un centro de especialidades, sin hospitalización. Rocío Mosquera empleó un término nuevo y de difícil pronunciación, 'ambulatorización', para indicar que Sanidade apuesta por este campo. 'Cada vez hai máis procesos ambulatorios. No 60 % dos casos non hai que ingresar', dijo.
La escasez de inversiones en el Hospital también surgió durante su visita. 'É un ano complicado e hai que priorizar. Hai pendiente a dotación dun TAC (escáner). É un vello compromiso da xerente anterior e queremos asumilo. Esperemos que sexa este ano', dijo. Con Rocío Mosquera viajaron la gerente del Servizo Galego de Saúde, María Nieves Domínguez, y la gerente de Xestión Integrada de Ourense, Eloína Núñez. Fueron recibidas por la exgerente del Hospital, María Jesús Magadán.
Momentos antes de la reunión con los profesionales del Hospital, la nueva gerente, Guillermina Agulla, mostró la línea que pretende seguir: 'Avanzar en la atención integral y que la atención primaria tenga continuidad con la especializada', explicó.
