La Federación ha programado una reunión para analizar un contrato televisivo que ha puesto a la LEB Oro en pie de guerra
A 24 horas par el inicio de la LEB Oro los clubes no tiene todavía notificación oficial de quién, cuándo y, sobre todo, cómo se retransmitirán los partidos de la jornada. La decisión unilateral de la Federación Española de Baloncesto (FEB) de aceptar la oferta de la Liga de Fútbol Profesional (LaLiga) para ceder los derechos de las retransmisión de los partidos ha puesto en pie de guerra a los clubes. Un salto de calidad en la realización de los partidos, pero un grave problema de difusión al tener la entidad presidida por Javier Tebas solo la intención de retransmitir dos partidos por jornada.
Los clubes han unificado posturas y han buscando una reunión con LaLiga para aumentar el número de retransmisiones y acercarse lo máximo posible a la totalidad de partidos emitidos cada jornada.
Directivos y jugadores se han manifestado públicamente en contra de este acuerdo y las críticas a la FEB han sido constantes desde la pasada semana.
Ayer, por la tarde, los clubes recibieron, por sorpresa, un correo electrónico citándolos a una reunión a las doce del mediodía en Alcobendas (sede de la FEB) para tratar en exclusiva este tema.
Hoy los clubes no saben cómo deben grabar su partidos, si deben hacerlo, qué posibilidades tienen de emitir o ceder la emisión de los partidos que no elija LaLiga e incluso si el acuerdo es definitivo. Todo a 24 horas para que algunos de los equipos empiecen a jugar.
La Región se puso en contacto con directivos de varios clubes de la LEB Oro y las reacciones son similares, aunque prefieren manifestarse en privado. "Es un vergüenza el trato que estamos recibiendo", "haremos lo que podamos, pero nuestra opinión no importa" o "sinceramente creo que a LaLiga tampoco le han contado ni la verdad ni lo que realmente es la LEB Oro" son algunas de las frases de directivos de tres clubes distintos de la competición. Es más, varios clubes confirmaron ayer a La Región que no tienen intención de acudir mañana a la reunión con la FEB.
Una situación muy delicada y que amenaza con dejar a la LEB Oro sin uno de sus principales focos de promoción. La liga más ilusionante y ambiciosa en muchas temporadas puede, caprichosamente, ser la menos seguida.
Los aficionados temen quedarse sin ver a sus equipos, los clubes tienen la sensaciones de estar siendo ninguneados y la FEB actúa por libre. La liga está amenaza y, para colmo, desde dentro.
